OL: El largo camino a la verdad.

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Elijah

Al ingresar al cementerio, observo a algunos brujos en frente de una tumba. Rápidamente me acerco y lanzo a uno de ellos lejos. Posteriormente, golpeo a dos más mientras los demás se alejan de mi lugar, dejando a una sola.

-Han secuestrado a mis hermanos. ¿Dónde están? - le pregunto a Monique.

-Estás interrumpiendo a la consagración de mi tía Sophie. - mi rostro muestra confusión cuando veo su nombre en la tumba.

-¿Cómo ocurrió esto?

-La tía Sophie fue una víctima de la guerra. - responde.

-Monique, te recomiendo que me des lo que quiero, a menos que quieras que derribe este lugar y todo lo que hay en él.

-Eso no será necesario. Tengo un mensaje para ti... de Celeste.

Alza su mano hacia mí y siento un leve dolor en el cuello. Desabrocho mi camisa y veo un nombre en mi cuerpo. Luego siento dolor en mis brazos y más nombres aparecen.

-Para encontrar lo que estás buscando, sigue el camino que ella dejó. - dice sonriendo...

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Rebekah

Despierto con una estaca en mi corazón, en una camilla de hospital. 

-¿Qué demonios estás haciendo, zorra despiadada? - gruño cuando veo a Genevieve.

-Pobre Rebekah. - voltea hacia mi lugar con una fuente. - Deberías descansar. Pareces un poco enferma. - desprende la estaca de mí con fuerza y vierte la sangre de esta en la fuente. - Por supuesto, eso lo esperaba, dada la cantidad bastante impresionante de veneno de hombre lobo que hay en tu sistema. ¿Qué te pareció ese chico lobo, por cierto? Pensé que parecía tu tipo...vulgar y dispuesto.

-Si no estuviera tan malditamente enferma, te arrancaría la cabeza.

-Pero estás enferma. Y reconfortar al enfermo siempre fue uno de mis talentos. Cuido a mis amigos. - se acerca con un paño húmedo. - Éramos amigas, ¿verdad?

Ubica el paño en mi frente para después murmurar unas palabras hasta que comienzo a ver imágenes.

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"Nueva Orleans, 1919.

-Tranquilo, tranquilo. - le digo a un paciente que tose sangre. Veo su reporte que yace al costado de la camilla. - Un hombre enfermo sin identificar. - tose sangre sobre mi delantal. - Eso no puede ser bueno.

Gruño para mis adentros y miro alrededor. Veo a una chica a lo lejos y la llamo.

-Tú. Pelirroja. - me mira y le hago un gesto con la cabeza para que vea al paciente.

En un instante se acerca a él y le da un remedio para que lo beba. Se comienza a calmar y sonrío de medio lado.

-Como magia. - murmuro. - Pero, bueno. ¿Qué esperar de una bruja que practica. - la sostengo del brazo cuando pasa por mi lado.

-Es un simple remedio con hierbas. - murmura para que solo yo pueda escucharla. - No te detendrá lo inevitable, pero debería aliviar su dolor y tranquilizar sus pulmones. Durante un tiempo al menos.

-Eres bastante buena en esto, señorita... ¿Cuál es tú nombre?

-Genevieve.

-Encantador. Tal vez podrías darme algunos consejos.

-Por supuesto. Aunque es un poco extraño. - la miro con confusión. - Un vampiro sirviendo como enfermera.

-Por favor, querida, soy una vampira original. Si mi ciudad está siendo atacada por esta desagradable gripe, es mi deber echar una mano. Además, si todos estos mueren, ¿Quién quedaría para comerse? - Susurro sonriendo.

Original Love: "Klaus Mikaelson" [2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora