Mi gran debut

5

Después de aquélla conversación, Lucy volvió con sus amigas y estas la esperaban con cierta curiosidad en sus miradas.

--Y bien ¿De qué quería hablar Natsu contigo? --se abalanzó Levy olvidando su enojo hacía la rubia.

--Nada importante, sólo quería preguntarme algo.

--¿Nada importante? Pero si hace un año babeabas por él --comentó la albina.

Heartfilia se ruborizo al recordar eso y se preguntó si sus amigas aún seguían creyendo esa mentira o si era momento de contarles la verdad.

--Sobre eso, creo que les debo una explicación...

No pudo terminar porque en ese momento el grupo de amigas de Lissana, la prima de Mirajane, iban pasando por ahí y ésta trato de saludar a su familiar sin recibir respuesta alguna por parte de la de cabellos cortos.

--¿Por qué sigues intentando llamar su atención Mira? --interrogó la peli azul--. Ella es muy mala contigo y siempre te trata mal en frente de todos.

--Está bien, ella no es así, además no me molesta --sonrió para intentar ocultar su tristeza.

Lissana Star era conocida como la prima de Mirajane y Elfman Strauss, lo cual era bastante aceptable ya que los tres tenían un parecido innegable, aunque a diferencia de ellos dos, la menor si venía de una familia muy adinerara que según algunos chismes, sus padres se la pasaban viajando debido a los negocios que tenían por todo el mundo, sin embargo, como muestra de buena voluntad, habían invitado a los dos hermanos Strauss a quedarse en su casa para hacerle compañía a su pequeña Lissana, aunque ésta parecía no querer ningún contacto ni nada que la relacionara con dos estudiantes becados.

Lucy tampoco tenía buenos recuerdos de la albina.

La campana sonó anunciando el fin del almuerzo, por lo que todos los estudiantes procedieron a dirigirse a sus clases.

--Escuchen --llamó la atención de sus amigas--, tengo demasiado que explicarles, pero siempre que quiero decir algo hay interrupciones por todas partes.

--No te preocupes Lucy, hablaremos cuando terminen las clases --sugirió la albina.

--¡Ya sé! ¿Qué tal si hacemos una pijamada hoy en mí casa? --propuso Heartfilia.

--¡Suena bien!

--No estoy muy segura si podré ir --contestó Levy.

Había recordado que aún seguía molesta.

Regresaron a sus clases y Lucy pasó todo ese transcurso pensando en cómo arreglar las cosas con su mejor amiga.

Finalmemte el horario de clases terminó y todos se dispusieron a ir hacía sus casas o a pasar el rato con sus amigos.

La rubia se apresuró a encontrar a su amiga de entre toda la multitud y le estaba costando un poco debido a que ésta sabía utilizar su estatura a su favor y ser muy escurriridiza.

McGarden creyó haber perdido a Lucy cuando ya no pudo divisarla por detrás, así que se confió y emprendió su viaje a casa cuando sin querer se topó con la amiga que tanto había tratado evitar.

--¿Te vas sin despedirte? --dijo de brazos cruzados.

La otra no hizo más que desviar la mirada y bajar la cabeza. No tenía a dónde escapar, así que tenía que enfrentar esa charla ahora.

--Levy yo... --empezó--. En verdad lo siento tanto, entiendo que quieras respuestas, pero no te las puedo dar en este momento y no es porque quiera ser aceptada, es porque de verdad es muy difícil para mí hablar de esto de nuevo, pero no es porque no te tenga confianza, al contrario, te digo esto porque sé que tú eres muy compresiva y seguro me entiendes...