Hiraeth ↣ [𝚐.𝚠.]

-𝖊𝖑𝖊𝖛𝖊𝖓: 𝘩𝘢𝘱𝘱𝘺 𝘹-𝘮𝘢𝘴, 𝘓𝘪𝘭𝘺

HIRAETH — CAPÍTULO XI
feliz Navidad, Lily

25 DE DICIEMBRE, 1999

—Vamos, Lil. ¡Es imposible que estés enferma el día de Navidad!

—No. No es imposible — dijo Lily con una voz taponada.

—Al menos baja a abrir los regalos... — dijo el Weasley tirando de su brazo — O al desayuno de Navidad.

—Está bien... — murmuró la chica poniéndose una sudadera por encima del pijama — Vamos allá.

Y así, ambos jóvenes bajaron decididos y sonrientes hacia el salón de la pequeña casa, donde un gran abeto era el centro de todo.
La sala de estar seguía tan decorada como antes, pero ahora con montañas de regalos bajo el árbol.

—¡Feliz Navidad! — felicitó la rubia al terminar de bajar las escaleras. El pequeño Teddy corrió a sus brazos.

—¡Lily! Quiero abrir los regalos — protestó.

—¿Seguro que tienes regalos? ¿Te has portado bien este año? — el niño frunció el entrecejo algo confuso. Su hermana le acarició la nariz con el dedo índice y comenzó a reír.

Al mirar a su derecha, Lily se encontró con la mirada perdida de George, pero no con la mirada de "no entender" o de "no estar atento", si no su mirada perdida en los ojos de la chica.

—¿Georgie? — llamó la Lupin.

—Me encantáis — soltó sin dejar de mirarle a los ojos —. ¿Y si abrimos los regalos? — cambió de tema frotándose las manos.

Lily le sonrió, para así dirigirse hacia el gran árbol que adornaba el salón. Dejó a su hermano en el suelo para que abriera los dos paquetes que le correspondían.

Los desenvolvió con ilusión y sus pequeños ojos brillantes, para tras el primer paquete, encontrarse uno de los típicos jerseys de Molly, color naranja con una "T" verde en el medio.
El segundo paquete era el regalo de George y su hermana, el cual contenía un juego de carreras que se movía sin necesidad de ser conducido.

La chica rubia observaba alegremente a su hermano jugar bajo el árbol con sus nuevos regalos. Ella notó que la mirada de unos ojos cafés se encontraban en ella.

—¿Qué? — preguntó con burla.

—Te toca — insinuó George señalando los regalos con un movimiento de cabeza.