ღ ;;; 𝙰𝙳𝙰𝙿𝚃𝙰𝙲𝙸Ó𝙽!!
❝ Minho despierta en una habitación de hospital con todo el cuerpo adolorido y una pierna rota, no puede recordar nada de lo que le pasó, ni siquiera su propio nombre. Hasta que un hombre de cabellos negros entra en su h...
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Detective Namjoon.
2 días han pasado. Dos.
Desde que tuve aquella charla con Jihyo en el hospital, sólo he logrado obtener que los números telefónicos eran falsos y que la dirección de la casa que se encontraba anotada en la hoja de alta, también era falsa.
Aquel día que fui a la dirección indicada, no había rastro de la pareja. Grande fue mi sorpresa cuando toque el timbre y ninguno de los dos salió. En cambio, una señora de edad se había aparecido en la puerta, con un semblante confundido.
Recuerdo haberle preguntado por Han Minho y por Han Jisung, inclusive le enseñé un par de fotografías de ambos pero ella no tenia idea de quiénes eran. Me dijo que en la casa sólo vivían ella y su esposo desde hace más de 40 años, así que no quise preguntar más, con una sonrisa desilusionada, le pedí disculpas por incomodarla y me despedí.
No tenía nada, todo seguía siendo una telaraña de falsedades de la cual no podía entender.
Hasta ahora.
Que me encontraba parado en medio de mi oficina, observando con todo un esquema armado de las pocas pistas que tenía. Eran pasadas de las 10:00 de la noche pero no tenía ganas de ir a casa, a parte que Gahyeon estaría en el turno de la noche en el hospital y prácticamente me quedaría solo en el departamento que compartía con ella.
Escuché que alguien abría la puerta y me volteé para ver quién era.
—¿aún sigues en tu encrucijada?
Reí ante su pregunta.
—sí, bueno... Me quedé estancado Jackson.— le respondí a mi amigo, volviendo mi vista al pizarrón.
Lo sentí colocarse a mi lado y él también le echó una ojeada a mi esquema. —Me preguntó cómo es que Han Jisung de enteró de que su esposo tuvo un accidente.— comentó él con tono despreocupado.
Y entonces, un foco de encendió por encima de mi cabeza, tal y como en las caricaturas.
—Jackson...creó que estás en algo.— le sonreí y volví a mi escritorio rápidamente, revisando los documentos que Jihyo me había enviado por correo.
En una hoja que debía rellenar el doctor a cargo, en la sección de reconocimiento, decía: El esposo llegó unos 20 minutos después de que el paciente ingresará a la sala de emergencia, identificó un tatuaje en el cuerpo del herido.
—20 minutos...— susurré. —no nombran a ninguna otra persona, más que al esposo...¿y cómo es que él se entero en un lapso tan corto?
Mi amigo ladeó la cabeza en confusión. —no lo sé... ¿Algún amigo le habrá avisado?
—no hay nadie Jackson... Entrevisté a las pocas personas que estuvieron ese día y todas solo eran testigos del accidente, los que ayudaron a socorrer a Minho.