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03/¿?

El reloj de la habitación marcaba las 4:30 pm y podía sentir las pisadas de Jisung en las escaleras

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El reloj de la habitación marcaba las 4:30 pm y podía sentir las pisadas de Jisung en las escaleras. Necesitaba saber quién era la persona que estaba tocando el timbre de esa manera tan repentina.

Tal vez, sólo tal vez, aún tenía esperanzas de salir vivo de este lugar.

De inmediato me saqué la manta que me cubría la mitad del cuerpo y desenrede con cuidado las cadenas, levantándome de la cama en un solo pie.
Cojee hasta la ventana que daba al balcón y sentí como aquellas energías perdidas volvían.

Era el Detective Kim.

¡Él estaba aquí!

Al parecer Jisung aún no abría la puerta principal, ya que el detective seguía esperando de brazos cruzados al otro lado de la puerta. Tenía que llamar su atención de alguna forma, así que recordé el pedacito de alambre debajo de la cerámica de gatito. Lo volví a tomar del velador y volví al balcón, doblando el mental en una especie de bolita.

Mis posibilidades de que este objeto logré llamar su atención eran casi nulas pero es lo único que se me ocurría en este momento. Agradecía que el balcón  estuviera en una parte de la casa que daba una vista exacta a la entrada principal. Lancé la bolita con la mayor precisión posible, en dirección a la cabeza del detective, para mi buena suerte y gracias a mi excelente puntería, logré que la bolita impactara contra su sien.

El detective se desconcertó un poco por el ligero golpe y miro a sus costados hasta que alzo la mirada y tuve que hacerle señas con mis manos para que se diera cuenta de mi presencia.

Él abrió sus ojos en sorpresa y trato de avanzar hasta donde yo estaba pero le hice una seña con mi mano, diciéndole que debía quedarse donde estaba. Pareció entenderme y se quedo quieto en su lugar.

Volví a hacer otra seña con mis manos, diciéndole esta vez que Jisung estaba en la casa y que tenía un arma consigo. Él alzó su pulgar en mi dirección, dándome a entender de que la había captado y con ambas manos me indicó que debía volver al interior de la casa. Asentí y le suplique con la mirada que me sacara de una buena vez de este lugar.

Ingresé de nuevo a la habitación y me volví a colocar en la cama, enrollando la cadena en mi pie para luego cubrirme con la manta. No podía escuchar mucho desde donde estaba pero confiaba en que el detective Kim sabría que hacer.

Pasaron unos cuantos minutos en donde solo podía escuchar los latidos  acelerados de mi corazón retumbar con fuerza y podía sentir como la espera se me estaba haciendo eterna. Hasta que logré percibir un sonido, era la puerta principal y al parecer esta se estaba cerrando. Luego, Jisung volvió a la habitación con un semblante calmado.

—¿Quién era?— le pregunté algo inquieto, no me gustaba para nada la expresión que tenia plasmada en el rostro.

—oh, sólo era uno de los vecinos de la zona, quería que le devolviera unas herramientas que me prestó.

𝑺𝒆𝒄𝒓𝒆𝒕 𝒐𝒃𝒔𝒆𝒔𝒔𝒊𝒐𝒏.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora