24. La espera

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Narra Kevin

Llevo toda la tarde buscándola, no la encuentro por ningún lado. Y para colmo el localizador ha dejado de funcionar. No se qué más podría pasarme hoy, hay días que lo mejor es no levantarse de la cama.

Estoy enfadado y más que eso! La estúpida de Jannet tuvo que aparecerse por la oficina después de dos años. Esto es increíble!! Si monto un circo me crecen los payasos. No podría haber venido otro día, tenía que venir precisamente hoy y con esos aires de grandeza que se da.

Debí haberla echado nada más atrevesar la puerta pero no, tuve que escuchar todas las tonterías que salían de la boca de mi prima, que si mi tía está en la cárcel, que si tú no haces nada, nuestra reputación está manchada y así una serie interminable de críticas y quejas. Tuve que aguantar sus estupideces y sandeces un largo rato.

Pero si esto ya era lo suficiente malo para mi salud, ella tenía que faltarle el respeto a Sara. Mi Sara que es tan insegura que apenas está empezando a descubrir el mundo.

Estoy seguro de que ha malinterpretado toda la situación, sino nunca se hubiera marchado así, de esa manera olvidándose hasta el bolso. No hay manera de que la pueda localizar. Cómo demonios la voy a encontrar ahora? Cómo demonios voy a protegerla?

Necesito pasar por casa, llame antes y no estaba voy a cambiarme y solo me quedan dos opciones, llamar al estúpido de Taylor y sino está con él, llamar a la policía. Espero que esté con el. La policía me dira la estupidez del día, es mayor de edad y debe llevar al menos cuarentena y ocho horas desaparecida.

Ojalá y este bien, todavía no puedo olvidar la última vez que desapareció. Cuatro días sin poder encontrarla casi acaban conmigo. Si tengo que volver a pasar por esto de nuevo, es probable que me muera o mate a alguien.

Estoy en la entrada de la casa, sale a recibirme el nuevo mayordomo ahora mismo no recuerdo cómo se llama.

- Señor quiere algo de cenar?

Niego con la cabeza, y me encaminó a hacia mi habitación.

- lástima la señora tampoco tomo nada. Dice el mayordomo.

Esas palabras hacen que pare en seco, me vuelvo hacia él.

- Sara está aquí? Cuando llegó porque no me lo dijistes antes..

Lo lleno de preguntas, creo que no sabe cuál responder.

- La señora llegó hace unas dos horas, la acompaño hasta la puerta un chico joven, venía empapada. Atendiendo a la niña y se subió a la habitación.

Salgo disparado hacia la planta de arriba, me acerco a la habitación de Anne, abro la puerta y paso a oscuras.

Anne duerme en su cuna, está tan grande ya, siento que en el mes que no estuve a su lado creció demasiado.

Miró hacia la cama y allí está Sara, me acerco y veo como está empapada en sudor, su respiración es irregular. La llamo y no responde, la zarandeo un poco esperando que despierte pero no lo consigo.

La cojo en brazos y salgo disparado hacia el hospital, mientras bajo las escaleras veo aparecer a Nana, le explicó rápido y salgo a toda prisa de la casa.

Llevo más de dos horas en esta maldita sala de espera, nadie me dice nada, me estoy volviendo loco. Llevo mis manos a mi cara. No la quiero perder a ella no!!

Flashback

Estoy en casa de mis abuelos debo de tener unos ocho años, mi abuela ha preparado galletas para merendar.

Estoy sentado en el porche con el abuelo, me está contando por enésima vez la historia de como conoció a la abuela.

Yo solo puedo sonreír, el abuelo llama a la abuela, pero no viene la vuelve a llamar pasan los minutos y no llega.

Se levanta de la mecedora y entra en la casa yo voy detrás de él.

Se acerca al sillón, mientras le dice:

- Despierta dormilona...

El abuelo da un grito y coge el teléfono rápidamente,me acerco y veo a la abuela con los ojos cerrados, no se porqué el abuelo se pone así.

- abuela, abuelita despierta ya vamos a merendar, venga no te hagas la dormida. Le cojo la mano y la tiene helada...
Llegan muchas personas y una ambulancia.
El abuelo me coje de la mano y me saca fuera.

- lo siento cariño la abuela no va a despertar, Dios la llamo a su lado y la convirtió en un ángel. Dice mientras lágrimas empiezan a brotar de sus ojos.

Fin del flashback

La muerte de mi abuela me dejó traumado tarde mucho tiempo en superarlo. Desde entonces no había vuelto a abrir mi corazón a nadie hasta que Sara llegó a mi vida.

- Familiares de Sara Márquez?

Me levanto de la silla y me acerco a la enfermera.

- Soy su marido, respondo abatido.

- Acompañeme el doctor hablara con usted, le explicará la situación.

Yo la sigo en silencio, entramos a una habitación, detrás de una mesa hay sentado un hombre con el pelo blanco debe de tener unos sesenta años debe de ser el doctor.

- Le voy a explicar la situación, Ella está estable, si hubiera tardado un poco más en traerla no hubiéramos podido hacer nada por ella.
Tiene una infección considerable, la estamos tratandola con varios antibióticos. Tiene dañado el sistema inmunológico, según veo en su historial hace aproximadamente un año ella acarreaba un cuadro acusado de desnutrición. Ahora solo podemos esperar a ver cómo su cuerpo reacciona.

- Puedo verla doctor?

- Si, la enfermera Wilson lo acompañará.

Está dormida, la veo tan indefensa otra vez he fallado y no he podido protegerla, si tan solo hubiera estado más pendiente de su salud. Pero ella es tan terca. Le resta importancia a todo.

Han pasado cinco días, y no parece haber mejoría aunque el doctor dice lo contrario, porque demonios no abre los ojos porque no se despierta? No lo entiendo.

Después del secuestro tardó menos en reaccionar, está situación me está volviendo loco.

No vales nada (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora