Soy su mami

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-Mamiiiii- Catalina sabía que pasaría pero no pensó que tan pronto, su pequeña hija de casi dos años corría todo lo que le daban sus piernitas hasta ella- mi padino no deja pintar. Legañalo.- acusó la niña con gesto severo, todos los Weasley miraban a la niña con la boca abierta.-

-¿Mami?- la voz de Charles Weasley se escuchó clara.-

-Si- respondió Catalina mirando a Lucía, quien todavía esperaba un accionar por parte de ella- soy su mami- ella se agacho con Damira en brazos- ¿Dónde esta tu padrino?

-Allá- la pequeña pelirroja señaló con su pequeño dedito- Malina Tofy si dejo a bebé- reprocho ella- es más bebé que mí.-

-Mami- Daniel llegó gritando, al parecer a él tampoco lo autorizaban a algo- padino pota mal.-

-Díganle a su madrina que lo regañe- Daniel corrió hacia donde de seguro estaba Bill, pero Lucía se mantuvo en su lugar.-

-Mami ¿quen es?- preguntó señalando a la bebé en sus brazos.-

-Es Damira ¿Quieres besarla?- la niña miró a la bebé con recelo antes de acercarse y para darle un besito.-

-No es de tú- recordó la pequeña pelirroja sacudiendo su largo cabello brilloso.-

-No, no es mía- concordó la rubia y Lucía sonrió.-

-Devuélvela, mami- dijo la niña con inocencia – segulo su mami la estaña.-

-Lo haré- respondió poniéndose de pie – ahora ve a pintarte la cara y dile a tu padrino que yo te autoricé- la niña sonrió y salió a la carrera.-

-¿Cuántos años tienen?- preguntó Charlie al ver alejarse a la niña.-

-Cumplirán dos años y seis meses- respondió ella volteándose a mirarlo.-

-¿Y no pensabas decírmelo?- reclamó el pelirrojo, Damira sintió la tensión y empezó a llorar, Arthur Weasley se acercó a ellos y tomo a la bebé en brazos.-

- Charlie, este no es el lugar para hablar de esta cosas.-

-¿Dónde prefieres hablarlo?- preguntó el pelirrojo mirando a Catalina, ella iba a contestar cuando un grito de júbilo por parte de sus hijos llamó la atención de todos en la mesa.-

-¡Abuelos!- gritaron los mellizos y corrieron al encuentro de un matrimonio de edad madura que todos conocían muy bien, el hombre tomó a Lucía abrazándola con adoración, la mujer hizo lo mismo con el niño, Catalina empezó a caminar hasta ellos pero fue retenida del codo.-

-Tenemos que hablar, Catalina- recordó Charlie y ella lo miró.-

-¿En serió?- preguntó ella con un murmullo- ¿Y vas a creer lo que te diga?

-Por favor no hagan esto aquí- pidió el señor de nuevo- Charlie, serénate.- el pelirrojo guió sus ojos unos segundos hasta su padre para volver a fijarlos en Catalina, ella lo miraba desafiante.-

-Catalina, hija- la voz de Narcisa Malfoy la obligó a romper en contacto visual, la rubia dirigió la mirada a los recién llegados.-

-Señores Malfoy, es un gusto volver a verlos- saludó Catalina.-

-Por favor, dinos por nuestros nombres, las circunstancias nos han hecho familia- pidió Lucius manteniendo el porte- Señores Weasley- saludó y la mayoría de los pelirrojos le devolvió el saludo.-

-Mami- la cantarina voz de Lucia llamó la atención de la rubia medimaga- los abuelos tajeron al tío Daco y a la tía Mimi a la festa.-

-¿En serio? ¿Y los dejarán pintarse la cara?- preguntó Catalina divertida, mirando al joven matrimonio Malfoy, quienes se acercaban con Scorpius en brazos.

El polvo de hadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora