10.- Tu chico favorito.

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Narra _____:
Cinco minutos para bajar del autobús.
Una vez que mis pies tocaron el suelo una fina brisa despertaba a estas horas de la manaña.
Había puesto mis manos en los bolsillos de mi sudadera mientras Eren iba a mi lado.
El castaño me miraba de reojo por mi vista clavada en la entrada del hospital. En uno de esos momentos se acercó más a mí para acariciarme algo la espalda. Esto último me sobresaltó y me sacó de mis pensamientos. Giré mi cabeza para verle como asentía con seguridad a la vez que yo le lanzaba una sonrisa con pequeños sonrojos en mis mejillas; él hizo lo mismo.

-Es por aquí.- Le indicaba.

Teníamos que subir dos plantas por las escaleras hasta llegar a la habitación de Falco. Esta se encontraba tras llegar al tercer piso, era la primera sala nada más terminar de subir el último escalón.
Un escalofrío me recorrió por dentro al ver su puerta cerrada y en suma tranquilidad.

Narra Eren:
Llegamos hasta el tercer piso.
Ella iba delante mía mientras yo la observaba como miraba la puerta de la habitación de su hermano con cautela.
Al acercarnos a esta pude ver la ficha colgada a un extremo del marco de la puerta; podía leer perfectamente lo que sufría junto con las pastillas y medicamentos que le administraban cada semana.

"Paciente N° 24: Falco Suzuki. Esclerosis Lateral Amiotrófica."

Fue lo que alcancé a leer antes de que _____ se posara a mi lado. Yo giré mi cabeza para verla como veía la misma cartilla que yo y luego giraba su vista a mí.

-La esclerosis que sufre Falco le genera que su elasticidad se vea cada vez más reducida por el endurecimiento de sus tejidos y órganos.

Ella me miraba con una vista relajada a la vez que me hablaba de su hermano. Yo la escuchaba con atención mientras que ella abría la puerta con delicadez.
_____ pasó primero, yo me quede apoyado en el marco de la puerta.

-¡_____! ¡Estás aquí!- dijo el niño.

Yo solo podía oirle, ya que mi vista era algo reducida.

-Estoy aquí...- Respondió _____ con una sonrisa.- He traído a un amigo, ven Eren.- me desprendí del marco de la puerta para colocarme al lado de ella.

-¿Es Eren? ¡Hola Eren!- dijo Falco a la vez que podía verle "¿Me conoce?" pensé. Era un niño algo más rubio que su hermana y mostraba una alegría radiante. Miré algo sorprendido a _____ por que su hermano al parecer me conocía y después de eso me dirigí a Falco con una gran sonrisa.

-Quedaros aquí, ahora vengo.- dijo _____ a la vez que giraba su espalda.- Puedes sentarte ahí Eren.- me señaló un sillón al lado de la cama del rubio.

Ella desapareció enseguida por la puerta a la vez que me quitaba la sudadera que llevaba encima para colocarla en el respaldo del sillón.
Mientras que me sentaba Falco me miraba con alegría.

-Me alegra poder verte.- me dijo sonriendo.

-¿Ya me conocías?- le sonreí.

-Mi hermana me ha hablado de ti.- me quedé sorprendido ante lo que dijo, "¿_____ le ha hablado de mí?". Apoye mi codos en mis rodillas a la vez que le escuchaba.- ¿Sabes? Ella nunca tuvo muchos amigos y me alegra que haya podido conocer uno más. Me ha contado a muchos lugares en lo que habéis ido, me encantaría ir con vosotros.- río en lo bajo y yo le sonreía.

Sin duda era un niño dulce. El carácter de él y de su hermana era algo parecido.

-Me alegra oir eso. Y cuando quieras podrías venir con nosotros.- le dije sonriendo.

-Ojalá. ¿Me harías un favor de traerme la silla de ruedas?- me dijo. A lo que torné mi vista a aquella que estaba en una esquina del lugar. En seguida me levanté para ir a por ella a la vez que Falco se colocaba en el extremo de su cama.

 𝐏𝐚𝐫𝐚𝐝𝐚 24 | 𝐄𝐫𝐞𝐧 𝐉𝐚𝐞𝐠𝐞𝐫 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora