𝐏𝐚𝐫𝐚𝐝𝐚 24 | 𝐄𝐫𝐞𝐧 𝐉𝐚𝐞𝐠𝐞𝐫

15. Es mutuo.

-Hola, ojos bonitos.- ¿E-Eren?

-¿E-Eres tú...?

-¿No recuerdas mi voz? Claro que soy yo tontita.

-Has tardado en llamarte.

-En verdad, lo he hecho por tu comodidad. Sé por lo que estás pasando así que te di tiempo preciosa.

-Eren...

-¿Qué tal estás? Aquí las cosas van con normalidad. ¿Sabes? Ayer salí a una fogata grande que hicieron en la playa con Armin, Jean y algunos compañeros más, faltabas tú.
Armin y Jean me preguntaron por ti, no sabes las ganas que tiene Armin de conocerte, igual hasta te llevarías bien con su novia, Annie. Por cierto, creo que Jean tiene pareja por lo que he oído hablar.

-Si...si que han pasado cosas.

-Sabes que esperaba que aparecieses en cualquier momento...

-Lo sé. Yo también pensaba lo mismo.

-¿De verás?

-Eren. Te hecho de menos.

Oí como Eren suspiró levemente. Fueron unos segundos en lo que esperé su respuesta para luego oirla.

-Ahora no me digas esas cosas...que si no te hecharé más de lo que ya hago tonta.- reí al igual que él.- Mi día ha cambiado ahora que no estás en él, ya no puedo disfrutarte ni con que sea con la mirada.

-Me haces sonrojarme aunque no lo veas. Tengo tantas ganas de verte de nuevo.

-¿Vendrás?

-Sorpresa.

-No me gustan las sorpresas.

-Oye...y yo no te dije que mi sopresa aquel día fuera follarme.

-Ya... es que prefiero las sorpresas inesperadas y espontáneas tanto para el uno como para el otro.- Tenía una voz ronca. Cualquier diría que de solo oirlo se enamoraría de él.

-Eren. ¿De que tienes ganas?

-Tengo ganas de quitarte las tuyas.

-Ya veo que es mutuo.

-Me encantaría deleitarme con solo poder acariciar tu cintura...

-¿No tendrás a nadie al lado verdad?

-¿Por qué? No me digas que vas a decir algo que va a hacer que viaje hasta allí para que te folle de nuevo, ¿verdad?

-En verdad...aún recuerdo aquella noche, se que nunca hemos hablado de ello. Nunca estaba segura de saber de que manera era por la que me veías a los ojos.

-Te veo como la mujer, la mujer más preciosa que he podido observar en la vida. Y nunca te lo dije, pero tus manos, joder, tus manos tan delicadas hacen que me enciendan.
Me he preguntado muchas veces...¿esas manos tan frágiles que tienes para pintar también tendrán otros usos?

-Eren...- reí.- Me espero cualquier cosa tuya.

-¿A sí? Como qué, ojos bonitos.

-Empezando porque te oigo más feliz de lo normal...y encima muy coqueto...Te seré sincera, estas manos te gustarían que estuvieran en otras partes dando placer, ¿o me equivoco?