Dark truths (Oscuras Verdades)✔️

Capítulo 3

La noche había llegado y con ello llegó el hambre y la sed. Desde que habíamos salido de milos y por los percances que tuvimos no nos habíamos percatado que no llevábamos comida y agua, sin contar que teníamos que buscar un refugio para poder dormir y pasar la noche.

Después de acordar un punto de encuentro las tres nos dividimos, yo buscaría un refugio mientras recolectaba ramas para una fogata, Yam buscaría nuestra cena ya que es buena cazando y Vash buscaría agua. Habíamos acordado que no estaríamos muy lejos del punto de encuentro y que si veíamos o escuchamos algo extraño trataríamos de correr hasta la otra. Al ser hijas de las estrellas nuestra piel al hacer contacto con la luz de la luna esta podía verse como un pequeño reflejo y eso nos daba ventaja para poder saber dónde estaba la otra.

Recogía varias ramas secas de cedro que yacían tiradas en la tierra húmeda del bosque cuando comencé a escuchar un silbido de ave. Supe enseguida que se trataba de Vash, tire las pocas ramas que había cogido y me eche a correr en dirección a dónde provenía el silbido, topándome en el transcurso con Yam.

— Es Vash tenemos que ir a ayudarla— dijimos ambas al unísono

Corrimos en distintas direcciones en busca del lugar exacto donde provenía el silbido y en uno de los tantos lugares que recorrimos la encontramos de espaldas mirando hacia enfrente sin parar de silbar. A medida que avanzábamos podía escucharse con suma claridad el cantico más hermoso que nunca antes había escuchado, de igual manera podía escucharse el choque de agua con las rocas.

Vash al percatarse de nuestros rostros que revelaban desconcierto se acercó sutilmente a nosotras y casi en susurros dijo:

— Encontré agua, y algo más...

— ¿Qué más? —pregunto eufórica Yam interrumpiendo a Vash

-— A una chica tomando un baño en aquel lago — dijo entre pequeñas risitas.

— ¡¿Y eso qué?! Queremos agua Vash, no espiar a una chica —respondió frustrada mi amiga al ver que la situación no era para nada grabe como habíamos pensado y que nos había preocupado por nada.

—Tiene razón. Vash no puedes jugarnos bromas como si no tuviéramos suficiente ya con los problemas que nos rodean, pensamos que algo malo te había pasado y recordando lo de antes... no hagas más bromas de ese tipo— dije suspirando al final

—Pero y el agua...

—Vendremos cuando la chica se haya marchado y ya

— No Marli no entiendes — sujeto mi brazo —Al principio creí lo mismo que ustedes y pensaba en irme y después regresar sin causar tanto alboroto pero cuando estuve a punto de marcharme ella se giró y pude reconocer la marca de un Bosco en sus ojos y el color de cabello me afirmo mis sospechas —finalizo llevándose un dedo en medio de su boca en señal de silencio.

—Perdón pero aun no entiendo nada, ese Bosco ¿Qué tiene de malo? —cuestiono Yam sin haber entendido nada.

—Como se nota que no has puesto nada de atención a las clases que nos dan —contraataque —los Bosco viven en Said, y Said y Milos están técnicamente juntos así que por más que se haya perdido ¿Qué hace aquí? —agregue casi susurrando para evitar que la chica quien seguía cantando nos pudiera escuchar.

— He escuchado que no suelen estar solos nunca y mucho menos suelen habitar lugares tan solitarios como este bosque así que creo que por nuestro bien es mejor irnos de aquí —sugirió Vash.

Era extraño que un Bosco viniera a un lugar solo y tan frio como este bosque, ellos no frecuentaban lugares solos y menos de noche, tampoco podía afirmar si estos rumores eran ciertos porque de mi parte nunca los había comprobado pero por lo que mi intuición me decía, encontrar a alguien a mitad del bosque cuando acabábamos de salir de un gran aprieto no era una buena señal.