𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐈𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐋𝐎𝐒 𝐃𝐄𝐋𝐀𝐍𝐓𝐄𝐑𝐎𝐒 || 𝐈𝐧𝐚𝐳𝐮𝐦𝐚 𝐞𝐥𝐞𝐯𝐞𝐧¹

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ARIANNA SHARP
📍ISLA DESCONOCIDA

Él, sorprendentemente nos agradeció diciendo que a esta hora salen las mejores olas, y que gracias por despertarlo.

A Tori y Sue se le volvió a escapar el balón, que de nuevo, iba directo hacia el salvador de Willy.

Chutó la pelota con una potencia increíble, el chut fue directo hacia Darren que no consiguió detenerlo.

Si alguien que no había tocado un balón en su vida chutaba así, imagínate si empieza a practicar.

—Va menudo susto me he llevado vi venir ese balón hacia mi..

—Oye, ¿tú juegas a fútbol, verdad?

—¿A eso?, Ni una vez, ¿por?

—¿Cómo que ni una? ¿Y te gustaría jugar con nosotros?—Mark tenía que ser.

—¿Jugar?

—Si eres capaz de chutar con esa fuerza, te divertirías muchísimo jugando.

Él se río.—Si claro muy buena, soy surfista no futbolista.

—Ya se cual es la razón, después de todo no eres más que un aficionado, y te da miedo no llegar a nuestro nivel.—Hablé consiguiendo que gire su cabeza hacia mi.

—¿Como?—Se acercó a mi.

—El fútbol no es tan sencillo como para que pueda dominarlo cualquiera, mucho menos alguien que nunca ha jugado, da igual el talento físico que tengas.

Se estaba enfadando, que lo subestimen no le gusta ni a él, ni a nadie, por eso se quedaría, solo a demostrar que si es capaz.

—¿Es que no lo acabas de ver?, Os he devuelto ese lanzamiento, ¿o no?

—Si, una vez, que me atrevería a decir que fue pura suerte.

—Pero Ari...

—Vale ya está, eh, tú, si jugaré al fútbol.—Se dirigió a Mark.

—¿De verdad?

—Claro yo jamás me vuelvo atrás en lo que digo.

—Esto...¿Cómo te llamas?—Le preguntó Mark.

—Hurley Kane.

Nos colocamos para jugar, incluso yo entre al campo quería ver de qué era capaz Kane.

—¿El balón tiene que entrar ahí no?—Él desde su puesto chutó el balón, a Tori no le dio tiempo a reaccionar de lo rápido que iba, y Mark lo despejó a último tiempo.

—Ha sido genial Hurley.—Le alabó Mark.

—A que si.—Ese ego que no pase hambre.

—Se te ve muy seguro ¿no?—Le preguntó Tori.

—Bueno es que comparado con el surf, esto del fútbol no es para tanto.

—No puedes subestimar el fútbol de ese modo.

—¿Qué no puedo dices?

Vi como Sue se le acercaba a Tori, seguro para hacer de cupido.

Cuando tube el balón se lo pase a Hurley.

—Kane, chuta a puerta.—Él estaba empanado, al parecer lo que se le daba bien era chutar y no todo lo demás.

Jude le volvió a pasar la pelota a Hurley, antes de que llegue a los pies de este, Erik corto el pase.

—La verdad es que es algo inútil.—Escuché a Nelly.

Así siguió el partido, llegó un punto en el que me aburrí bastante, entonces con permiso de la entrenadora me fui a pasear por la isla.

Era todo muy bonito, me encantaba la naturaleza.

Después de un largo rato decidí volver.

Volví por el mismo camino que vine y llegué a una cabaña, en la que estaban los chicos.

Entré y saludé a todos, que ya estaban sentados en la mesa esperándome.

Me senté y empezamos a comer, nunca faltaba Scotty echándole picante a los platos y bromas de parte de todos.

—¿Y de dónde sois? ¿Cuál es vuestro Instituto?

—El Instituto Raimon los ganadores del torneo frontier, ¿no sabes de lo que hablo verdad?

—Este...pues ni idea.—Mark estalló en carcajadas.

—Gracias Hurley, gracias a ti logramos efectuar el baile de mariposas.—Le agradeció Tori.

—Oye también gracias a mi, ¿no?—. Se metió Sue, era increíble la energía de esta chica.

—Hurley ¿tú estudias en esta isla?—Le preguntó Sue.

—No, que va, yo sólo vengo aquí a surfear, en realidad vivo en Okinawa.

Tori le preguntó que cuantos años tenía, resulta que el chico era un poco mayor que nosotros.

En Japón se tomaban MUY enserio eso de respetar a los mayores.

Mark le pidió disculpas, no se por qué, pero lo hizo.

(...)

Zarpamos hacia Okinawa, donde se encontraba el Delantero de fuego no sabíamos si era Axel, pero voy con la esperanza de que fuera él.

Axel es un pilar muy fundamental para el equipo, él fue el que marcó el primer gol del Raimon, él fue uno de los primeros en creer en el Raimon.

Todos los chuts que les habían dado la victoria, en la mayoría participaba Blaze. Cuando lo nesecitabas para ti, te apoyaba, un poco a su manera pero lo hacía.

—Cuantas más esperanzas tengáis, más grande será la decepción si veis que no es él.—Quería reirme, pero para no llorar, ya que sabía que Scotty tenía razón.

Una vez pisé tierra, observé hacia todos los lados posibles.

Todos fuimos a buscar por nuestra cuenta.

De lo distraída que estaba no vi a la persona que se chocó contra mi.

—Perdón yo...

—Esta bien, Arianna.

Fruncí el ceño y mire hacia la persona, era Claude Beacons.

No toda mi vida fui a la Royal Academy, antes iba a un colegio a las afueras de la ciudad inazuma, ahí conocí a Claude.

—¿Claude?—Mi pregunta se respondió sola al mirar sus ojos, eran iguales a los de mi amigo de la infancia.

—El mismo.

Se levantó del suelo y me tendió la mano.

Sonreí hacia él, había pasado mucho tiempo, a él no le gustaba el contacto físico, así que reprimí mis ganas de abrazarlo.

—A sido un placer volverte a ver, pero me tengo que ir ya o mi entrenadora me dejará fuera.

—Está bien.

Cuando tenía pensado seguir con mi camino, sostuvo firmemente mi mano y me atrajo hacia él, formando un abrazo.

Le correspondí el gesto, lo había extrañado mucho.

Ambos nos separamos y seguimos nuestros caminos como si no nos conociéramos.

Vi a Mark y a unos cuantos críos, ellos lloraban mientras llamaban a su hermano y Mark estaba que no sabía dónde meterse.

Mark tenía que liarla sí o sí, si no, no era él.