Un amor diferente

Ser contigo como soy conmigo

Esta es mi última carta. Hoy quiero despedir una etapa de mi vida, soltar te da espacio a crecer y creeme cuando te digo que es lo que más quiero en este momento.

Quiero crecer, comprendí que Peter no necesita ser un niño para volar y que la magia está dónde y cuándo tu quieras.

Hoy me despido de nuestra historia que me ha escrito. Le digo adiós al dolor que pasamos y ¿por qué no? A los momentos felices también.

Hoy te guardo en un cofre como un tesoro y te escondo en el fondo de mi corazón. No hay mapa, no hay equis. No hay un camino ni viento en popa. No hay pirata.

Hoy no soy nadie más que yo.

Y tú no eres nadie más que tú.

Hoy lo dejo atrás. No sé lo que pasará mañana. Por fin pude comunicarme contigo, mañana te veré en el mismo lugar de la última vez. Bajo aquel árbol que fue testigo de los besos más sinceros que dimos.

Mañana por fin sabré de ti y esto, no voy a mentir, me aterra demasiado. No sé qué va a pasar, no sé si esta será la última vez.

Así que esta es mi última carta. Me despido de nuestra historia de amor con un beso.

Quizás estés leyendo esto ahora, no sé si estoy contigo o si estás en casa. Con esta carta están otras seis. Jamás pude enviartelas ya que no tenía una dirección. Mañana te las daré todas.

Si todo sale bien este será un nuevo comienzo para nosotros. El final de un largo capítulo, un invierno que se extendió y ahora da paso a la primavera.

Si todo sale mal, este es el adiós. Sólo me queda darte gracias. Gracias por enseñarme cuánto amor se puede contener, por enseñarme que dentro de cada amor hay un poco de locura. Gracias por enseñarme que los besos se dan a ojos cerrados y corazón abierto.

Fuiste eres y serás mi primer amor. Serás esa historia que contaré cuando los años pasen, cuando no pueda recordar tu rostro ni tu voz.

Quiero ser contigo como soy conmigo, sin secretos ni metáforas, desnudo y descalzo. Que me veas en tus ojos y reflejarte en los míos.

Quiero que seas esa historia que nunca olvidaré. Te amo...

-Siempre tuyo, Alan.