Nunca te dejé ganar

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Es curioso como el tiempo te permite fluir. No me malentiendas, no creo que el tiempo nos cambie en absoluto, creo que el único que puede cambiarnos somos nosotros mismos y nuestra actitud ante las vivencias que vamos acumulando. Pero lo curioso con el tiempo es que te da esta tranquilidad, este espacio contigo mismo. Te cambia el horizonte para que puedas ver que el atardecer no siempre es el mismo. Porque nosotros no lo somos tampoco. 

Te hace ver que la vida es tan solo ayer y hoy. Soy consciente del ayer porque te conocí; y soy consciente del hoy porque no estas. He perdido tanto tiempo pensando en el pasado y en como te veré en el mañana que los días se me confundieron. Así que, si me lo permites, te escribiré como si el tiempo fuese tan solo un detalle. 

Recuerdo vividamente la sensación de tus manos. Si cierro los ojos puedo sentir el calor que emanan, lo pequeñas que son en comparación a las mías. Puedo oír tus pasos rápidos tras de mi al verme llegar, puedo sentir lo suave que era el aire y lo cálido que es el sol. puedo sentir que estás en ese lugar en el que pasamos tantas horas como si fuesen simples segundos. Vuelvo a ti como tu vuelves a mi en cada tarde, cada vez que estoy por dormir y mi mente se encuentra fuera de mis ojos. Con cada canción que escuchamos juntos y con cada sonrisa que me dedicaste. 

A veces me es difícil recordar. Creo que eso es lo que mas duele. Ya no puedo recordar tu voz... 

Quizás en el futuro se invente una herramienta para personas con el corazón y mente rotos. Desde que te fuiste he estado perdiendo recuerdos. Hay cosas que ya no puedo hacer y eso me aterra. El tiempo también puede ser un villano. 

Cuando no tengo recuerdos intento sentir a través de ti. Quiero saber cómo te sentiste esa vez que te conté sobre mi libro favorito. Cómo te sentías cuando veías a tus amigos jugar pero tenías que estar conmigo. Cómo te sentías cuando no era divertido estar a mi lado. Cómo te sentías cuando yo no podía ver tu rostro, cuando tu no podías ver el mio. Ahora lo entiendo mucho mejor...  yo jamas te deje ganar. 

Fui tan egoísta contigo que no te deje disfrutar de mi compañía. ¿Cuantas veces te sentiste atrapado conmigo? ¿Cuantas veces sentiste alivio de escuchar el timbre y poder irte? ¿Qué sentiste cuando estabas solo? Jamas te deje ser libre.

Siempre fui yo el que ganó, me sentí en la cima cada vez que me preferías a mi, cada vez que me veías, cada vez que te sentaste a mi lado. Nunca pude ver cuantas cosas te hice perder. Cuantas experiencias con otras personas, cuantos juegos, cuantas risas. No te deje extrañarme porque estaba tras de ti en cada paso. Cuando pienso en eso me siento repulsivo. 

Es curioso como el tiempo te hace fluir. Yo ya no soy igual que ayer, y se que tu tampoco lo eres. Solo espero algún día, sentir tu esencia junto a mi otra vez. Aunque tenga que perderlo todo. Porque prometo, que esta vez, no dejare que tengas que perder parte de ti por estar conmigo. Te prometo que podrás contar conmigo en cada paso que quieras dar a mi lado. Te prometo que esta vez seras tu quien ponga las reglas y yo jugare a tu juego. Porque la única forma de sentir que no todo está perdido es cuando veo tu sonrisa. 

Perdidamente tuyo, Alan.

Un amor diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora