Grey & House

11. Bruja

La tensión se sentía en el ambiente y nadie se sentía cómodo de estar ahí. Chase era capaz de matar a House con solamente la mirada y Alex no sabía qué hacer, Mer era su persona y verla inconsciente le partía el corazón.

— Resolvamos esto como personas civilizadas — Cuddy iba entrando con una carpeta en la mano y un café en la otra. Era una situación difícil porque ambos equipos tenían a alguien importante al borde la muerte.

— ¡Civilizados! — gritó Chase, — House escondió que Cameron era la paciente secreta, de haber sabido hubiera trabajado mejor hubiera dedicado tiempo — Chase daba vueltas por la oficina sosteniendo la cabeza y a punto de una crisis de ansiedad. — Ese es el problema — dijo House— El problema es que aparentemente el doctor "carita de angel" solo pone dedicación cuando alguien que le importa está en peligro. -- House con su bastón en la espalda caminaba dando vueltas. — Claro que no, simplemente hubiera dedicado más tiempo, además ella es la madre de mi hija — dijo Chase señalando con el dedo a House.

— A nadie le importa Meredith — mencionó Cristiana susurrando y tenía los dedos en boca, su miedo le hacía sentir que se ahogaba y nadie se daba cuenta — A nadie le importa Mer, aquí a nadie le importa Mer, a nadie le importa Mer — Cristina repetía esto una y otra y otra vez cada vez un poco más fuerte aunque no dejaba de susurrar. Ella solo veía que House andaba peleando con Cuddy y Chase y aparentemente nadie se acordaba que Meredith también estaba en peligro.

— Cristiana ¿Estás bien? — preguntó Jo, al ver que la mano de Cristina temblaba. Cuddy volvió a verla y se dió cuenta que estaba a punto de un colapso nervioso.

— ¡A NADIE LE INTERESA LO QUE TIENE MEREDITH! — gritó Cristina a todo pulmón a punto de caerse Foreman la sostuvo y la sentó en el sillón de la oficina.

El instinto "problemas se avecinan" se activó en Cuddy y sabía que debía tomar el control de la situación de inmediato.

— Todos respiramos profundo y vamos con calma — mencionó Cuddy sentándose en la silla. — Esto es lo que haremos.

— House, usted se encargará de tomar las decisiones médicas de Meredith Grey — indicó Cuddy. Jo casi se ahoga con el agua que tomaba y empezó a toser todos la voltearon a ver — estoy, estoy bien — dijo mientras se limpiaba con una toalla. — Doctor Karev— mencionó Cuddy — Usted se encargará de tomar las decisiones médicas de Alison Cameron.

— Yo soy la decana de este hospital y esa es mi decisión final — ¿Alguna pregunta? — Cuddy en lo profundo de su corazón deseaba que esa decisión fuera más que suficiente para calmarlos.

— Cuddy, no haga esto — dijo Foreman — Si desea mejor yo tomo las decisiones de Cameron, la conozco desde hace diez años. — Y yo podría tomar las Meredith — dijo Cristina. El silencio de la oficina fue cambiando a ser murmullo de personas peleando por lo que ellos creen que era lo mejor.

— Eso no va a pasar — mencionó Cuddy. — Por lo mismo que conocen a esas personas he decidido cambiar los roles para que sus decisiones sean puramente imparcial.

— Pero si House va a decidir por Meredith ¿Porque yo no puedo decidir por la doctora Cameron? — preguntó Cristina.

— Porque usted no aparece como apoderado de la doctora Grey — contesto Cuddy.

Cristina quedó paralizada porque ella pensaba que Meredith le confiaría su vida.

— Eso quiere decir — comenzó a hablar Chase— que el apoderado de Cameron es ¿House?

Antes que empezaran a hacer alboroto Cuddy llegó hasta su escritorio y sacó dos hojas dónde se dejaba constar.

Meredith Grey

En pleno uso de mis facultades mentales nombró al doctor Alexander Michael Karev como apoderado que tomará las decisiones médicas en caso sea necesario.

Cristina leía la hoja una y otra vez porque no daba crédito a lo que leía.

Allison Cameron

En pleno uso de mis facultades mentales nombró al doctor Gregory House como apoderado que tomará mis decisiones médicas en caso sea necesario.

Lo mismo pasó con Chase que no podía creer lo que sus ojos veían. Ambas hojas estaban firmadas y avaladas por un abogado.

— ¿Conformes? — preguntó Cameron.

— Si — respondieron todos al unísono salieron de la oficina casi todos estaban inconformes con la decisión menos Jo y la Trece que pensaban que eso era lo mejor Chase y Cristina solo pesaban en una cosa

"Esa mujer es una bruja"