Grey & House

8. Bienvenidos al infierno.

No es de extrañarse que House se sintiera en casa cuando volvieron al Princeton-Plainsboro. Ese era su hábitat natural.

Entró cantando muy felíz, subió el elevador llegó hasta su oficina y volteo a ver la sala donde hacían los diagnósticos.

—Es bueno volver—dijo Taub —Es increíble volver—respondió House. Arrojó su mochila y jalo la pizarra. Foreman y la Trece entraron

—¿No sería mejor esperar a los otros?—preguntó Chase. —No sería mejor que estés con tu esposa y tú bebé—preguntó House.

House salió de su oficina y comenzó a caminar hacia el elevador, todos lo siguieron. —¿A dónde vamos?—preguntó Taub.

—A caminar, ver mujeres desnudas, y restregarle a Cuddy en su cara que Wilson falló en su misión. Veo que no tiene idea de dónde está Cameron— continuó House.

—Quite esa cara de idiota, y dele a nuestros colegas una vuelta por las instalaciones— nadie sabía de lo que hablaba hasta que Foreman se dió cuenta que los del Grey-Slone estaban entrando por la puerta.

—Y yo ¿porque?—pregunto Chase —eso se lo decía a Taub, pero tú eres más idiota que él. Así que doctor modelo de ropa interior. "Presente al hospital"—contestó House.

—¿No hay internos aquí?—fue lo primero que Cristina notó al llegar. —¿Eso es lo que te preocupa?—dijo Jo,— a mí me preocupa que me traten de menos, es decir todos ustedes son titulares, pero este es mi primer año como titular

—Bienvenidos al hospital Universitario Princeton-Plainsboro—dijo Chase con una enorme sonrisa. Y a su infierno—pero esto último lo dijo casi susurrando.

—Perdón, ¿qué fue lo segundo que mencionaste?—preguntó Meredith. —No dije nada-respondió Chase. —Además de Meredith alguien tiene alguna pregunta.

Cristina levantó la mano —¿Por qué no hay internos si este es un hospital universitario?

—Bueno, nadie había hecho la pregunta; pero este no es un hospital de enseñanza común—comenzó Chase—antes de venir a aprender acá debes tener tu título y haber aprobado el examen de residentes.

—Entonces deberían eliminar lo "universitario" del nombre—dijo Alex.

—Claro que tenemos internos y residente, pero ellos trabajan específicamente en la clínica y emergencia, ninguno de ellos viene a este lado del hospital, a menos que uno de los médicos de acá les pida venir—respondió Chase.

—Así que luego de eso, vamos a la oficina de House ahí es donde ocurre la magia—dijo Chase mientras les invitaba a tomar el ascensor.

Subieron, todos y una charla nada interesante acompañó el corto recorrido.

—Aquí es—menciono Chase, entrando a una oficina con una gran mesa al centro, una sala muy buen amueblada, una televisión de 50 pulgadas y muchos electrodomésticos. Lo único que no hacía juego era una pequeña pizarra que estaba a la par del cesto de basura.

—¡Woo!—yo pagaría por trabajar aquí—hablo Jo.

House, tardó un rato en llegar ya que estaba discutiendo con Cuddy y Wilson.

—Bienvenidos terrones de azúcar—grito House al entrar, cojeo hasta la pizarra y la puso de pie.

—Ya conocen a mi equipo— comenzó House. —oscuro, lesbiana, pequeñín y modelo —House, podemos continuar con el diagnóstico—consulto Foreman.

—Creí, que sería más educado presentarnos—dijo House mientras se trataba quién sabe cuántas píldoras de Vicodin.

Alex iba a comenzar a hablar pero House lo calló.

—Antes que digan cualquier cosa Cuddy quiere hablar con usted primero, y definir las "REGLAS DEL JUEGO"

La oficina de la doctora Cuddy era casi siempre un campo de batalla. Y al haber trabajado con House desde hace más de diez años pocas cosas le sorprendían.

—Buen día, pueden sentarse.

Todos los del Grey-Sloan estaban impacientes al saber que pasaría.

Cuddy les paso una hoja con el logo del hospital y una parte para que todos pudieran firmar.

El hospital Universitario Princeton-Plainsboro se complace con su presencia así mismo le deja unas reglas que deberá cumplir a cabalidad para un mejor ambiente de trabajo

—Esto es estúpido—dijo Karev

—Siéntese doctor Karev—exige Cuddy.

—Sé que para ustedes esto es una estupidez o chiste, pero déjenme decirles que somos el mejor centro de diagnóstico del país. Además soy una experta en demandas médicas—Cuddy se notaba muy segura de sí misma. —Mientras ustedes recibe una o dos demandas mínimas cada seis meses, yo recibo dos al mes.

—Doctora Jo, quiere ponerse de pie y leer las reglas—pidió Cuddy

Jo se puso de pie y comenzó.

1. No somos titulares, esto implica que no podemos dar consulta, medicamentos o dirigir cirugías a menos que sea de extrema emergencia

2. Todo procedimiento que hagamos debe llevar la firma de autorización de un miembro del equipo de House.

3. Cualquier examen, estudio o análisis se le debe enviar una copia a la decana de Medicina, y archivarlo en una carpeta que diga "Hospital Universitario Princeton-Plainsboro'" en la portada.

"Me comprometo a no quebrantar ninguna regla"

Firman:

Doctora Meredith Grey

Doctora Cristina Yang

Doctora Josephine Wilson

Doctor Alex Karev.

Cada uno paso de mala gana a firmar. Pero no les quedaba de otra.

—Gracias doctores será un placer tenerlos aquí.

—Si esto es un mal sueño—dijo Cristina —alguien me dio un pellizco.