Para empezar esto era una locura a cualquiera que en su sano juicio se le pregunté.
— ¿En serio, Yang? ¿No quieres ganar? — le pregunta Foreman a Cristina, quien estaba sentada en el piso viendo cómo Alex y su equipo de "Ángeles" empezaban a hacer mil y una teorías sobre lo que tenían.
Cristina simplemente se puso en posición fetal abrazando sus piernas y su mirada era a la nada.
Al ver esto, todos se asustaron creyendo que Cristina tenía un ataque de pánico.
— ¿Cristina? — Ven, vamos — dijo Jo, quien se recostó en el piso, que se recostó en el piso como Meredith lo hizo hace algún tiempo.
Al fin los del otro equipo se fueron de la habitación, cerraron la puerta y esa fue la señal para que Cristina se pusiera de pie.
— Ya inútiles, ¿vamos a ganar o qué? — mencionó Cristina, que ya estaba en la puerta a punto de salir. — Espera un momento, no tenías un ataque — mencionó Cheese.
— Claro que no dijo Cristina, quiero a Meredith claro, pero por ese mismo cariño obviamente competirá en los juegos sanguinarios del muy molesto doctor House— dijo Cristina, con la mirada atónita de todos. — es más, si pierdo en estos estúpidos juegos Mer, si es capaz de morir.
Todos siguieron a Cristina, pensaron que iría al laboratorio o al cuarto de las chicas, pero no, Cristina se dirigió al estacionamiento y dijo.
— Ojitos lindos, ¿cuál es tu carro?
— ¿Me hablas a mí? — preguntó Chese atónito.
— Claro que sí, ¿Ves a otro doctor con ojitos lindos?
— Es ese — dijo Chese señalando una camioneta negra.
— Vamos, inútiles — dijo Cristina con voz burlona caminando hacia el auto de Chease.
Ya en el carro. Jo le pregunta: — ¿Le acabas de decir ojitos lindos a Dr. Chease? — Jo, al igual que todos, estaban asombrados por el comportamiento de Cristina.
— ¿Adónde vamos? — preguntó Foreman, quien al parecer disfrutaba de las situaciones incómodas de Chease.
— A la habitación de Meredith, y lo más rápido posible— contestó Cristina. — ¿Por qué vamos a la habitación de la doctora Grey? No deberíamos estar haciendo exámenes de laboratorio o pensando en que tal vez sea lupus — mencionó Foreman haciendo ademanes.
— ¿Cómo haremos exámenes si no sabemos qué estamos buscando? — contestó Cristina.
— Lo que haremos es seguir todos los pasos de Meredith, así sabremos qué buscamos.
Ya en la habitación comenzaron a inspeccionar todo, y nada salía de lo común. Revisaron fuga de gas, comida por si acaso se había envenenado. Al final, llegaron a la conclusión de que sea lo que sea que había pasado, no fue allí.
— ¿Ahora qué? — preguntó Jo, muy decepcionada de que no lograron nada, — Ahora iremos al restaurante Italiano y si no volvemos a Seattle.
Todos voltearon a ver a Cristina con la expresión de Isabella Madrigal "Enloqueciste mujer"
Y para sorpresa de nadie, el restaurante no fue de mucha ayuda. Camino al aeropuerto, Foreman y Chese iban con cara de ¡Oh por Dios, mate a Potter! Lo cual era insólito, porque House siempre les hacía hacer ese tipo de cosas, ir a la cárcel, invadir propiedad ajena, estafar. Pero nunca en los casi quince años trabajando ni juntos habían ido a otro Estado por un caso médico.
— Ya relájense, princesas, solo vamos, llegamos, vemos y salimos, nadie nunca se enterará de que estuvimos ahí. — contestó Cristina.
Lo que no sabían era que Wilson ya estaba dentro del avión, observando como un buen espía.
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Grey & House
FanfictionPor mucho tiempo, deseamos ver lo que estos dos podrán ofrecer, lamentablemente en la realidad no pueden trabajar juntos pero ahora sí, gracias a la magia de Wattpad dónde todo es posible. Resulta y acontece, que el problemático Dr. House fue invit...