LUNA DE MIEL II

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Yoongi había soltado la mano de Jimin para regresar por el vino y dos copas, con extrañeza notó que el menor se encontraba parado aún en la entrada.

- ¿pasa algo? -preguntó hasta llegar junto a él y entendió el por qué.

La habitación era pequeña, solo había una cama que abarcaba casi todo el espacio, un pequeño silloncito de terciopelo se encontraba a un lado, una mesita de noche y un espejo de cuerpo completo sellado en una de las paredes, pero lo que robaba la atención de los esposos era la cama enfundada de seda blanca al igual que las almohadas y sobre ella pétalos de rosas rojas esparcidos por todo el lugar. Jimin se acercó al ramo de orquídeas y peonias que se encontraba en medio de la cama y lo levantó con cuidado.

"Orquídeas para la fertilidad, peonias para el amor, por un matrimonio próspero" se leía en la pequeña tarjeta sin remitente, aunque Jimin sospechaba que eran de parte de su padre, pues el hombre sabía que Jimin amaba las flores.

Yoongi suspiró en su cuello sin querer. Apenas había caído en la cuenta de lo que todo el día se había tomado como un juego o un negocio.

Él podría ser un hombre serio y arrogante, pero no era un hijo de puta. Viendo todos los detalles y la reacción de Jimin hacia ellos le había hecho caer en cuenta de que el joven no se merecía lo que él mayor tenía en mente.

Yoongi no era romántico, hasta la fecha no había tenido una sola pareja seria; su vida se resumía en pasar horas trabajando, disfrutar de la variedad de placeres carnales que su posición y apariencia le permitían y dormir lo más que pudiese para recuperar las energías que perdía.

Por eso mismo jamás se había planteado casarse, pues no se imaginaba a sí mismo como un hombre de hogar, dedicado a una sola persona, sin embargo, ahora que ya estaba hecho, no podía faltar a sus votos.

Era un hombre orgulloso y se le había enseñado que el matrimonio era una promesa de respeto mutuo.

Miró al chico frente a él.

Esta persona sería su pareja por el resto de su vida, no podía tratarlo como trataba al resto, sería complicado, pues sus preferencias iban más allá de lo normal.

Nada comparado a lo que su ahora esposo podría haber experimentado antes.

-Son lindas -murmuró dejando las copas y la botella en la mesita de noche.

El menor asintió con los nervios de regreso sin saber exactamente qué hacer.

Solo se quedó ahí de pie y mirando el ramo, evitando dirigir la mirada al mayor, no quería demostrar su terror de lo que probablemente estaba a punto de suceder.

-¿Cuántos años tienes, joven Park? -preguntó Yoongi, cayendo en cuenta que no sabía absolutamente nada del chico.

-Cumpliré 21 en 7 meses -respondió con timidez.

Yoongi, quien le estaba dando un trago a su copa, casi se atraganta.

Maldijo a sus padres por lo bajo.

¡¿Qué putas pensaban casándolo no sólo con alguien más joven por 7 años que él, sino también menor de edad?!

-¿Sabes que tengo 27 años recién cumplidos? -el menor asintió- ¿eso no te molesta?

El chico simplemente negó.

Yoongi bufó y bebió el vino restante de un solo trago, sirvió la otra copa para su esposo y se la tendió.

-Ambos sabemos los planes que tienen nuestros padres para nosotros Joven Park -el nombrado asintió tomando asiento en el silloncito y dejando el ramo en la mesita de noche mientras le daba un trago al vino haciendo un gesto ante el nuevo sabor.

-Pero sus planes no llevan instructivo -murmuró el peli negro haciendo que el rubio lo mirara confuso- dime una cosa, pequeño, ¿tienes experiencia sexual?

Jimin se abochornó a más no poder, en su estómago algo se apretó y negó mirando el suelo.

-Lo suponía -habló de nuevo con la voz baja- aún así me acompañaste a esta habitación sabiendo que no tomaremos una siesta en realidad.

El chico volvió a asentir, su capacidad de hablar se había perdido por el nerviosismo.

-Toma tu vino, precioso, te ayudará a relajarte, te daré un poco de espacio y tiempo para que te prepares y tranquilices -sin esperar respuesta, salió de la habitación siendo seguido por Jimin, alzó una ceja ante eso.

-Lo siento, necesito mi bolso -susurró con vergüenza.

El mayor sonrió y tomó la pequeña mochila que Jimin había subido al jet.

Yoongi volvió a suspirar y se sentó en su lugar abriendo de nuevo la Macbook para no pensar tanto en el rubio de labios bonitos y trasero redondo que le esperaba. Tal vez iría despacio con el chico y sería suave con él, aunque no desperdiciaría su tiempo en su noche de bodas.

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Espero no se cansen de esperar, pero no quiero forzar la relación de Mimi y Yonnie será algo lento al inicio para después darle rienda suelta a nuestro precioso Hyung💖

Ojalá les esté gustando✨

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Actualización 21/06/24: 

Quería ir lento pero lo encerré a la primera oportunidad JAJAJAJA

My Boy [🔞]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora