PRIMER EXTRA.

746 105 16
                                    

--¿Queréis saber el sexo del bebé?--la abuela me aprieta la mano, transmitiéndome fuerza.

Yo estoy abrumada, mirándola a ella, a la obstetra, al monitor...

Ahí hay un bebé, en mi tripa hay un bebé. Mío. Pequeño y luchador.

No te ilusiones tan rápido.

Empiezo a llorar, pensando en lo fuerte que es mi garbancito, en todo lo que ha pasado...

--¿Estás bien, mi niña?--me limpia las lágrimas que caen por mis ojos y me besa la mano que me lleva sujetando desde que me he tumbado en la camilla.--Podemos esperar, no pasa nada.--aunque por sus palabras sé que quiere saberlo.

Voy a tener un bebé, no me lo creo.

Necesito a Yere conmigo, cogiéndome la mano y diciéndome que todo va a salir bien, que nuestros bebés de mayores van a ser mejores amigos... Necesito saber cómo está.

"Todo ha salido bien, hemos podido frenar la hemorragia a tiempo, pero has tenido una amenaza de aborto, el bebé corre peligro aún."

--Adrianna , ¿todo bien?--me pregunta preocupada la doctora.

--Sí, estoy bien, perdón.--me aclaro la garganta y sonrío débilmente haciendo como si nada, pero me acuerdo de algo.--¿Has llamado a Abraham?--le pregunto a la abuela.--No quiero que se pierda esto.--hago un puchero tratando de no echarme a llorar.

--Tendría que haber llegado ya, cielo, no sé qué habrá pasado, espera que llamo a su madre o ...--pero no consigue terminar la frase, al otro lado de la puerta se oyen los gritos de varias personas.

--Ese tiene que ser él, abuela, reconozco su voz.

La abuela sale de la sala, disculpándose con la doctora antes de cerrar la puerta.

Jamás he estado más nerviosa en mi vida.

Tampoco es que hayas tenido las suficientes experiencias como para poder comparar.

Sí, en eso tienes razón.

Muevo las manos, enrollando y desenrollando la sábana entre mis dedos.

Tengo que ser fuerte por los dos, no puedo perder a mi bebé, es lo único que voy a tener de él de ahora en adelante. No me va a quedar nada más.

--¿Te encuentras bien?--la doctora me mira con lástima.--Todavía estás a tiempo de interrumpir el embarazo, sólo estás de 12 semanas y...

--Que el mundo se pare que ya estoy yo aquí.--Abraham entra y nunca había agradecido tanto la presencia de alguien como ahora.--¿Preparada para verle?--se sienta donde antes estaba mi abuela y me coge de la mano, mirando fijamente el monitor.

--¿Verle?--le miro a la cara a la vez que alzo una ceja.

--Sí, verle.--dice serio. Mi abuela suspira pero no nos dice nada, se queda a los pies de la camilla.--Va a ser un niño, ¿verdad doctora?--esta lo mira mal, cosa que me incomoda.

--Justo le estaba preguntando a su...--deja en el aire la frase.

--¿Que le estaba preguntando el qué?--dice él de malas formas.

--Si quería saber el sexo del bebé.

Todos me miran y por instinto yo miro el pequeño bebé que aparece en el monitor.

--No lo sé...--noto un ligero apretón en la mano, miro a Abraham y sus preciosos ojos azules me calman.

--Respira e inspira, aguacate.--me empiezo a reír como una loca.

NO SE LO DIGAS A NADIE. [SAGA SECRETOS Y MENTIRAS I] ✅️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora