NO SE LO DIGAS A NADIE. [SAGA SECRETOS Y MENTIRAS I] ✅️

Cap 38.

Hola, niña mala.

Maratón 2/2.

Con el móvil en una mano, con la otra abro la puerta, que por suerte está sin llave.

--¿Dónde estabas?--oigo el grito de Adam nada más atravieso la puerta. Echo para atrás por inercia.

Le miro con cara de querer matarlo y paso de responderle, miro a su hermano, que viene hacia mí.

--¿Mi abuela?

--En su habitación, intentando localizar a tu padre.

Mi padre. Valiente hijo de la gran puta.

--Ahora bajo.--le digo, ignorando a Adam y subiendo las escaleras lo más rápido que puedo. Llego hasta la puerta de su cuarto y llamo.--¿Abuela?

--Pasa cariño.--oigo cómo se suena la nariz y paso. La veo sentada sobre la cama.

La habitación de invitados ya no es de invitados, es de mi abuela, como habréis observado.

--No hace falta que le sigas buscando.--la digo y en sus ojos puedo ver miedo.--Está con la madre de Samael, trabaja para ellos.--digo con odio.

--Cariño, seguro que no es ...

--Sí que es, abuela, estaba allí, yo misma le he visto.

--¿Por qué no ha venido contigo? ¿Qué ha hecho esta vez?

--Abuela, eso es mejor que te lo cuente él, yo no sé nada.--no me sale consolarla, siento que esto no está pasando, es como si fuera un mal sueño del que no puedo despertar.--Me voy a dormir ya, hablamos mañana.--me acerco a darla un beso y me marcho a la habitación de mi hijo.--Mi bebé...--susurro para mí cuando abro la puerta. Está dormido de lado, abrazado a la almohada. Me acerco con cuidado y le acaricio el pelo y la cara.--Te pareces tanto a él...--le doy un beso en la frente y salgo. Orien está en fuera, esperándome.

--Ven conmigo.--tira de mí hasta la planta de abajo, dirección al salón.--Creo que te dejaste esto tirado en el jardín.--señala a Kellen, quien me mira como si estuviera en una nube. Me saluda con la mano, alzando esta y puedo ver sus nudillos hinchados. Orien me acerca hasta dejarme frente al sofá, en medio del salón. Miro a mi alrededor, buscando a Adam.--No está, ha salido con el coche a no sé qué mierda.--me dice y yo suspiro de alivio.

--Bien, un grano en el culo menos.--digo y miro a Kellen a la vez que alzo la ceja en su dirección.--¿Y tú qué coño haces aquí?

--Hola, niña mala.--saluda como si nada.

No es normal que su puta voz me haga sentir así.

--Orien, es mejor que te vayas.--miro a mi cuñado y este niega con la cabeza.

--Ni lo sueñes, gorda.--se acerca a Kellen y pasa de largo hasta el sillón de una plaza, dejándome a mí plantada entre los dos.

Me empiezo a sentir incómoda, observada y nerviosa.

Voy a matar a Orien.

--¿Me explicas qué haces aquí?--digo, dirigiéndome a Kellen. Me cruzo de brazos y le escaneo.

Tiene varias heridas en la cara, también un hematoma enorme en el pómulo.

Joder.

--Mira.--saca algo de su bolsillo y alarga la mano. Me acerco a él con la palma abierta y me entrega un...

Un puto puño americano.

--¿Y esto?--digo, sintiendo que me suena de haberlo visto, aunque queriendo equivocarme.