El conde de Dryl

La juez

Parte I

Capítulo 3- La juez

Hope estaba sentada revisando algunos documentos para liberar a un pobre pescador que había sido acusado de robo. El pobre hombre había cometido el error de desafiar a un noble quien no dudo en difamarlo. Por suerte la juez logró ver más allá de la acusación y alcanzó dar con la verdad. Le entristecía ver como los poderosos abusaban de su posición para pisotear a su pueblo que en teoría juraron proteger. Por eso en algún tiempo ella pensó que la luz de Prime sería el camino a seguir. Un mundo donde todos fueran iguales y no por nacer en la riqueza o en la miseria serías discriminado. Un lugar donde solo los méritos, las habilidades y capacidades de las personas eran los más importantes.

Aún no creía como se dejó embaucar por aquellas palabras bonitas e ideales ingenuos. Por suerte, pudo salir de eso antes de que fuera demasiado tarde; además de que la fiscalía de Brightmoon se volvió autónoma, después de aquella revolución que trajo mucho miedo y dolor al pueblo. Con eso pudo entrar sin que nadie la investigara y con su gran desempeño como juez nadie dudaba de su palabra y de cómo se impartía la justicia. Realmente estaba orgullosa de lo que había logrado. La alegría la inundó al saber cuántas personas salvó y cuántas más salvará de la injusticia.

De repente su secretario anunció que tenía una cita importante. Ella no recordaba tener la visita de alguien ya tan tarde. Pensó que tal vez era otro desamparado que buscaba ayuda de alguna otra calumnia. Así que asintió al chico y dejó entrar aquel visitante inesperado.

Fue recibida por una joven. Esta se quitó la capucha que no dejaba ver su rostro y apareció la princesa Glimmer debajo de ella.- Majestad, ¿A qué debo su presencia?- Esto sí que era una sorpresa para la juez. La realeza evitaba a toda costa los contactos con la fiscalía, ya que no era de su agrado el poder que cada vez iba teniendo en estos días. Además que muchas de las decisiones perjudicaban a las casas nobles que por mucho tiempo fueron aliados de la corona. – Juez Light Hope. Vengo a entregar una denuncia.- Dijo contundentemente la princesa. Esto era aún más inusual. Hasta ahora la corona no había hecho denuncia alguna, pues se volvería un tema muy delicado si la resolución no era favorable a la familia real. – Debo admitir majestad que esto es una sorpresa. ¿Qué asunto viene a reportar?- Respondió Hope. – Es un asunto muy delicado. Quién hizo la denuncia me pidió que fuera anónima. Pero el contenido de esta es de vital importancia.- Glimmer sacó una carta de su vestido y se la entregó a la fiscal. Ella tomó con cautela el escrito. Abrió el sobre y leyó el contenido con cuidado. Sus ojos se abrieron un poco. Aquella acusación era muy grave.- Si es un asunto delicado. Prometo que le daré la mayor atención a esto.- Contestó con mesura la juez.- No espero menos de usted juez. La traición y Prime no es un asunto menor. Por lo que espero que esté de nuestro lado cuando digo que aquello es un problema que debemos cortar de raíz.- La fiscal volteó a ver de nuevo la nota y estuvo de acuerdo. Sí aquella acusación era cierta el pueblo estaría en un peligro inminente.- Si esto es verdad, así será. Usaré todo mi poder para evitar que esto crezca y me encargaré de aplicar justicia.- Satisfecha con la respuesta Glimmer sonrió y procedió a retirarse no sin antes decir.- Me alegra saber que estamos juntas en esto, Juez. Que tenga una buena noche y espero una respuesta inmediata.- Y la joven princesa se retiró sin más dramatismo.

Oyó el carruaje irse y ella solo se sentó en su silla insegura de que hacer. Por primera vez en su vida estaba perdida en su deber. Era obvio que la princesa ocultaba algo, pero ¿Qué podría ganar condenando a esta tal Catra Zaragoza? Bueno, bien podría empezar por el principio. Llamó a uno de sus guardias y pidió que trajeran ante ella a la mujer de nombre Catra.

La noche aún era joven cuando alguien irrumpió en la residencia Zaragoza. Las novias estaban a media cena de celebración cuando Adora fue a abrir la puerta. Fue recibida por un hombre quien saludo a la chica.- Buenas noches señorita. Busco a Catra Zaragoza, se requiere de su presencia en la fiscalía.- La rubia palideció, las palabras de Weaver sonando en su cabeza.- Adora ¿Quién es? - La morena se acercó a la puerta y vio al guardia.- ¿Catra Zaragoza?- Preguntó el oficial. La capitana asintió y entonces el hombre respondió.- Está en custodia por la acusación de traición. Le pediré que me acompañe a la fiscalía, en lo que se resuelve su caso.- Adora enseguida se interpuso entre el hombre y su novia.- No se llevarán a mi prometida a ningún lado.- La morena puso una mano en su hombro y la tranquilizó. – Estoy segura de que es un mal entendido.- Tomó su mano y la besó en el anillo. Luego se dirigió al hombre.- Lo sigo. – Adora volvió a tomar la mano de la chica y ella le dijo suavemente.- Es la juez Light Hope, ella sabrá ver la verdad y me liberará pronto.- Le dio un suave beso en los labios para tranquilizarla y después siguió al guardia hasta la fiscalía.