Idiota (Completa)

El Final de una etapa

El club de fútbol de la secundaria Raimon había crecido inmensamente tras haber ganado el campeonato del año pasado.

El ahora legendario capitán, Endou Mamoru, colocaba el trofeo del bicampeonato en los estantes del nuevo salón del club.
La directiva les otorgó un nuevo ambiente tras la segunda victoria consecutiva, uno más amplio, mejor equipado, con una cancha cerrada exclusiva para que los próximos "Raimon Eleven" entrenasen con tranquilidad, ahora la escuela tenía al mejor club a nivel nacional, siendo el orgullo estudiantil.

El último trimestre del tercer año de la secundaria estaba terminando, todos los jóvenes del club ya tenían propuestas de institutos superiores para ficharlos con becas deportivas, estaba llegando el momento de separarse.

Ichinose y Domon regresarían a Estados Unidos, ambos recibieron la oferta de un equipo semi-profesional, que además de proporcionales estudios de calidad, les aseguraba el ingreso a la primera división americana.

Hiroto y Midorikawa tenían numerosas ofertas de institutos en otras regiones del país, algunos eran de primer nivel, reconocidos por los excelentes jugadores que egresaban de sus instituciones. Al final, ambos optaron por estudiar en Hiroshima, al sur de Japón, la preparación académica era muy importante para ellos, porque Kiyama había sido elegido para ser el sucesor de su padre adoptivo para los negocios Kira, y estaba decidido a cumplir con su papel.

Fubuki no lo tuvo que pensar mucho, Hokaido era su primera opción, el instituto del norte helado nipón era reconocido por sus hábiles defensas y feroces delanteros, además, Goenji también había recibido una oferta de ellos, por lo que la pareja tuvo rápidamente su decisión.

Someoka se iría a Okinawa, era el lugar ideal para que sus habilidades como delantero se puliera, además de que la escuela no era tan exigente en lo académico pero contaba con contactos en las ligas europeas, cosa que terminó por convencer al pelirosa.

Kidou iría a la preparatoria más prestigiosa de Tokio, sus padres le habían conseguido el ingreso para estudiar ahí mediante sus excelentes calificaciones, así que él también partiría de la ciudad Inazuma, sin ir muy lejos, pero con el nivel académico que tendría que mantener y su buen rendimiento deportivo, todos sabían que el estratega se volvería alguien muy responsable.

Kabeyama todavía tenía un año más de secundaria, así que él sería el encargado de guiar a los próximos jugadores por el tricampeonato, los demás confiaban plenamente en él y en su crecimiento como jugador, había desarrollado más personalidad, se había vuelto un líder nato, admirando a Endou y teniéndolo siempre como referencia.

Ahí estaba el castaño, guardando las últimas cosas que moverían de la antigua caseta, empaquetando cuadros y uniformes, cuando su querido peliazul entró y le pidió que se sentaran.

- ¿Ya decidiste? - le dijo el castaño con una sonrisa - No puedes rechazar esa oferta Ichirouta, es una beca integral...

- Sí pero no es en Japón... - Suspiraba Kazemaru - No quiero irme de aquí, no sin ti. - miraba a los ojos al castaño - Todos los que se van, tienen la suerte de irse con su pareja, no pienso aceptar la beca si tú no puedes estudiar ahí conmigo...

- Kazemaru - Endou lo interrumpió - Yo tengo la oferta del instituto de Tokio, mis calificaciones complicaron las cosas, pero mi talento en el soccer ayudó y conseguí una buena oferta.

- Yo también tengo la opción de estudiar ahí y lo sabes...

- Sí pero también te ofrecieron el mismo instituto que a Kidou, tus calificaciones son excelentes, pero mejor aún, te ofrecieron irte del país... - Endou suspiraba, por más que le doliera, no quería truncar el futuro de su amado ojiavellana.