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Mire a Jimin y el me vía con ojos tristes y decepción en ellos, quise acercarme a él pero de nuevo Lucas me tomo del brazo y esta vez con todas mis fuerzas lo golpeé.

— No me vuelvas a tocar! — le grite.

Al girar vi como Jimin caminaba a la salida, corrí tras el y cuando por fin lo alcancé lo tomé del brazo.

— Jimin...

— Que me dirás _____, lo vi. Te vi besándolo que más claro que eso — su voz sonaba diferente, estaba dolido.

— El me beso Jimin— intente tomar su mano pero no me dejo.

— No importa, al final tú y yo no somos novios. Así que no tienes que explicarme nada— soltó y eso me dolió, creí que estábamos empezando algo bonito pero al parecer no.

— Jimin, yo jamás lo besaría porque lo único que siento por el es asco— río dolido por lo que dije.

— No parecía — su sarcasmo me dolió.

— Bien, si no me crees está bien. Nunca lo has hecho esto no debería sorprenderme pero creí que empezábamos algo pero de nuevo la ilusa aquí fui yo— dije y camine dejándolo solo en medio de la cancha.

Al regresar a la oficina del director, encontré a Eunwoo sentado con mi bolso en sus manos, al verme se preocupó.

— Qué pasó?— intentó revisarme pero solo lo abrace.

— Solo sácame de aquí — asintio y me tomo de la mano.

Me llevo de nuevo a la heladería, la mesera no se sorprendio al verme llorar, Eunwoo siempre me traía aquí cuando estaba mal.

— Entonces?— mi amigo me miraba preocupado.

— Se acabó mi pequeña esperanza con Jimin.

— Por Lucas cierto?— pregunto y asentí.

— Me beso y justo Jimin vio eso, me dijo que al parecer lo disfruté. Por Dios Eunwoo como puede pensar eso — comí de mi helado molesta.

— Linda el no sabe lo qué pasó así que solo se imagina lo peor— asentí.

— Y jamás se lo diría, no quiero que sienta lastima o tal vez asco— suspire y limpie mis mejillas.

— No lo creo pero me encargare de Lucas — fruncí mi ceño con lo que dijo, no quería más peleas.

— No harás nada, estarás en detención el viernes por tus frecuentes peleas — oí como gruño por eso.

— El director es un exagerado, apenas y toque a Lucas.

— Y dime que sabes de Jin, no ha ido a visitarme y mamá regresa el próximo sábado. Quieren cenar en mi casa el sábado?— pregunte, mi mamá adoraba a Jin y siempre que podía lo invitaba a cenar.

— Claro, sabes que Jin nunca rechazaría una cena de tu mamá — reímos por eso, Jin siempre cocinaba con mamá y a veces salían a comprar cosas para la casa como dos señoras.

— Gracias Eunwoo.

— Por?

— Por estar siempre para mi, eres el mejor— lo abracé fuertemente y me acogió con sus brazos.

— Sabes que eres como mi hermana y no dejaría que te dañaran. Además aún le debo dar una golpiza a Jimin por lo que te dijo.

— No es necesario, solo olvídalo— dije y continué con mi helado.

Al llegar a casa hablé con mamá por teléfono y le conté de la cena con Jin, estaba emocionada por verlo de nuevo y ya quería regresar a organizar esa cena.

Quise llamar a Jimin y arregle las cosas pero mi dignidad no me dejaba, el no quiso creerme de nuevo y eso me dolía. Guarde mi teléfono para no tentarme a llamarlo y me acosté para dormir.

Mi chico tiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora