No me acuerdo de nada mas.
Rubiuh:
Cuando llegamos al lugar de la quedada había demasiada gente, era como si hubiese un concierto o algo estaba repleto de personas, nunca creí que tanta gente iría.
Al llegar saludamos, claro algo general porque si no, nos hubiese tomado el día entero. Recibimos dibujos y todo tipo de regalos, los pusimos en los autos y luego empezamos a filmar y a correr por todas partes, luego hicimos un par de gilipolleces, al caer la noche la gente empezó a irse, a eso de las diez ya no quedaba nadie mas que nuestros amigos, fuimos a comprar algo para beber y nos quedamos en una de las plazas a conversar, hacer estupideces, grabar y claro pues tomar algunos tragos. Sin darnos cuenta ya habíamos bebido demasiado, casi todos estábamos borrachos.
Encendí un cigarrillo y me relaje tumbado en el pasto mientras fumaba cuando de pronto mire a Jen, estaba feliz junto a David riendo y mirando hacia el cielo, se podía notar de lejos como ambos estaban borrachos al igual que la mayoría de nosotros, me quede mirándoles cuando de pronto vi como Jen lo beso. Sentí algo extraño en mi, como un dolor de estomago, como si eso me hubiera dolido, fue demasiado raro, no quería sentir eso al verla ser feliz con alguien mas pero ¿en serio tenia que ligarse con personas tan cercanas a mi? Eso me cabreaba un poco y creo que aun mas si se trataba de mi primo.
De pronto Mangel me saco de mis pensamientos besándome, joder como necesitaba ese beso. Fue el momento perfecto para hacerlo, me saco de toda preocupación y me hizo sentir que no debía preocuparme por nada porque él estaba allí conmigo. Nos separamos cuando nos falto aire y moví mis labios a su cuello para besarlo despacio.
- Gracias.- Susurre en su oreja y sentí como eso hizo que el se estremeciera, al notarlo solo sonreí.
- Te quiero Rubiuh.- Dijo moviendo mi boca hacia la de él para poder besarme de nuevo.
Después de eso seguimos bebiendo y no recuerdo nada más.
Desperté con Mangel a mi lado, ambos estábamos desnudos ¿pero que coño? ¿lo habíamos hecho de nuevo? Joder, como me iba a doler el culo dentro de un rato. Mire a mi alrededor, estábamos en casa de Cheeto. Le di un pequeño beso a Mangel en los labios para que despertara, el abrió sus ojos y me miro.
- Buen día.- Dije mirándole a los ojos.
- Buenoh diah mi vida.- Me beso de nuevo pero poniendo su mano en mi nuca para hacer el beso mas intenso, puso su pecho en el mío y siguió besándome.
- ¿Qué paso anoche?.- Dije separándome de sus labios lentamente poniendo mis brazos alrededor de él y acariciando su espalda. Joder, amaba tenerle desnudo.
- No recuerdo náh, pero al pareceh noh divertimoh.- Dijo besándome una vez mas.
- Si pero no me gusta el hecho de no recordarlo.- Dije agarrándole con mas fuerza contra mi cuerpo, el comenzó a besarme el cuello. – Mangel.. no..- Dije cerrando los ojos y mordiéndome el labio inferior.
- No se que me pasa pero últimamente ehtoy loco por ti.- Susurro contra mi cuello mordiéndolo, lo que me hizo gemir.
- Mangel… para… o no respondo.- Dije acariciando su pelo.
- Vale, vale.- Sonrió y me dio un pequeño beso en los labios.
En eso sentí como Cheeto abría la puerta.
- JODER TIOS! DEJAD DE PARTIRSE EL CULO UN MOMENTO.- Dijo tapándose los ojos.
- OSTIA CHEETO!.- Dije agarrando las sabanas para cubrir a Mangel y a mi.
- Lo siento pero tenéis que despertar ya, estamos todos abajo esperándolos para comer.- Dijo mirándonos.
- Vale ya bajamoh.- Dijo Mangel, Cheeto cerró la puerta y se fue.
- Joder, casi nos ve desnudos.- Dije abrazándole.
- Venga no pasa nah, con lo cabroneh que son nuehtro amigoh anoche noh deben de habeh tomaoh hahta fotoh mientrah follabamoh.- Cuando Mangel dijo eso ambos nos descojonamos.
- Como lo hayan hecho les parto el culo a todos.- Dije riendo. – Venga, vamos a comer.-
Nos vestimos y bajamos, vimos a todos los que habían estado ayer en la quedada al parecer todos se habían quedado en casa de Cheeto, bueno volver a Madrid borracho no era una opción así que supongo que ese era el por que de todos aquí.
Mientras comíamos nos descojonamos con los chistes de Maximus, grabamos un par de gilipolleces, todo estaba perfecto hasta que me di cuenta de que faltaban dos personas; David y Jen. ¿Dónde se habían metido? Seguíamos todos en la mesa cuando de pronto aparecieron de la mano con una cara de felicidad inmensa. Al parecer Mangel y yo no habíamos sido los únicos que se divirtieron anoche.
- EH! YA HABEIS PARADO DE FOLLAR!.- Grito Cheeto desde la cocina acercándose a ellos.
- JODER! OS ESCUCHAMOS GEMIR TODA LA NOCHE!.- Grito Mario a la par de Cheeto.
Me estaban cabreando esos comentarios así que solo me gire, cogí a Mangel y lo bese para olvidarme de toda la mierda que había en mi cabeza.
- Sacadme de aquí.- Susurre contra sus labios con los ojos cerrados.
- Vale.- Dijo levantándose y cogiendo mi mano. – Tíos, Rubiuh y yo tenemoh que ir a comprar algunah cosah así que volveremoh dentro de un rato.-
Salimos de allí y fuimos a caminar, seguíamos cogidos de la mano.
- No se porque me molesta..- Dije mirando el camino.
- No me deh explicacioneh, eh normal que te molehte.- Dijo Mangel besando mi mejilla.
- Joder como te quiero.- Dije sonriéndole.
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