Tempel despertó en una cama vacía, si bien no necesitaba dormir, le gustaba acompañar a Efel cuando este lo hacía. A veces en el proceso su mente lo llevaba a lugares que comúnmente llamamos sueños. Como fue en aquella ocasión, a su lado no se encontraba el humano, se puso de pie y caminó por el pequeño departamento buscándolo, al darse cuenta de que no estaba en casa desde tan temprano asumió que habría ido a hacer las compras, comenzaban a quedarse sin comida y detergente. Aburrido y desganado al no tener a quién molestar, se sentó en el sofá a mirar televisión, los programas de ese horario no eran los más entretenidos así que al cabo de una hora fue hasta la habitación y comenzó a revisar las cosas de Efel.Era algo que aunque sabía que no estaba bien, le picaba tanto la curiosidad que caía ante esos impulsos. Sin embargo, Efel no era una persona que guardase mucho sobre sí mismo donde el mundo pudiese encontrarlo. No tenía fotos de ningún familiar, como si hubiera intentado borrar su pasado desesperadamente, tampoco tenía una caja de recuerdos de la secundaria o algo por el estilo. Ya había revisado su armario incontables veces, así que esta vez sacó de abajo de la cama una caja de cartón de tamaño considerable.
La mayoría de las cosas ahí dentro eran documentos legales y esa clase de cosas que los adultos protegen con su vida. Estaba su pasaporte y su certificado de graduación, pero muy en el fondo de esa caja encontró algo interesante. Un cuaderno de dibujo, no sabía que Efel podía dibujar también, pero estaba firmado por él.
El papel de la primera página era amarillento y tenía manchas de humedad, pero se rescataban los delicados trazos que juntos formaban un rostro. Y no uno cualquiera, era él mismo. Su mirada pérdida y triste, sus labios curvados hacia abajo y un brillo especial en sus ojos, la chispa que avisaba que estaba por llorar. Era un autorretrato conmovedor. Detrás de aquel dibujo había un pequeño mensaje. "Este no soy yo", ponía. Tempel sonrió para si mismo, y entonces quién, se preguntó.
Lo entiendo tras pensarlo varias veces, Efel no había podido ser él mismo, cuando estaba abrumado por todo lo que le pasaba, cuando las drogas fluían por su sangre y no podía respirar, entonces ese no era él. Aquello sólo era el dolor y las distorsionadas ilusiones de algún día poder encontrarse de nuevo.
Había más dibujos ahí, cada uno con unas breves líneas detrás. Desde paisajes hasta animales y personas desconocidas para Tempel. Había un retrato de un hombre muy parecido a Efel, con el ceño fruncido y una mirada de asco que hacía que su corazón se encogiera, detrás estaba escrito: "No quiero ser tu hijo". El cometa entendió y sólo cambió de página, el evento del supermercado tuvo más sentido y la historia familiar del humano comenzaba a aclararse. Entre las últimas páginas había el boceto del rostro de una mujer besando la silueta de la frente de un niño, era una fémina muy hermosa. Cuando Tempel giró la hoja, no encontró nada, era el único dibujo que no tenía ninguna frase detrás.
Volvió a poner todo en su lugar y se arrepintió por un efímero instante de haber revisado las cosas del otro sin su permiso, ahora le dolía un poco el pecho y no podía dejar de pensar en lo solo que debía haberse sentido Efel mientras dibujaba en ese cuaderno.
El día fue extremadamente largo, escribió su novela absorbido por lo que acababa de descubrir y cuando quiso darse cuenta ya era de noche y Efel aún no había regresado. Entonces escuchó la bocina de un auto afuera del edificio, la ignoró ya que nunca antes alguien se había dirigido a los inquilinos de ese edificio con el sonar de una bocina, pasó menos de un minuto y esta volvió a sonar mucho más fuerte y prolongada que antes. Tempel se sobresaltó, dejó de escribir y se asomó por el balcón, sólo para curiosear o tal vez aplicar unos cuantos insultos que había aprendido de Efel.
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Tempel
Teen FictionSobre seres fantásticos que iluminan la vida de las personas, siempre y cuando, estén dispuestas a creer que el amor existe. Efel es un joven pianista que sólo conoce la soledad y el tedio. Tempel es un cometa que apenas tiene brillo, el universo p...