Jugando al matrimonio, me enamoré de él.

Extraaa I🤩💍

Tres años después...

—¡Niños, hora de comer! —Grita Athena desde la puerta francesa que da acceso al jardín. —¿Destiny, donde están tu hermana y Sarah? —Le pregunta a su hermosa hija de seis años, está juega en la piscina en compañía de sus hermanos menores y sus primos, Daniel, Miranda, Javier y Carlos.

Miranda y Javier son los hijos de seis y cuatro años de Michelle y Jared. Carlos es el hijo de tres años de Samantha y Rafael mientras que Daniel es el hijo de dos años Patricia y Francisco, su esposo desde hace tres años.

—Creo que están en su habitación, están hablando de novios —Habla con desagrado como si el termino novio fuese la palabra más asquerosa del mundo.

—Si tu padre escucha eso se volvería loco —Bromea. —Niños, salgan de la piscina y vengan a comer —Michelle deja el plato de ensalada y regresa a la cocina donde están Samantha y Patricia ayudando a los últimos preparativos para el almuerzo familiar. —¿Darell, pequeño, puedes ir por tu hermana a su habitación?

—Sí, mami —Responde el pequeño de cinco años saliendo de la piscina y corriendo a las escaleras que conducen al segundo piso de la mansión.

—Sobrino, despacio o podrías caerte —Ordena Jared saliendo de la sala de juegos de Damon en compañía de Rafael y Francisco. —Escuchamos que ya está́ lista la comida —Se acerca a su esposa.

—Sí, amor. Pueden salir al jardín y cuidar a los niños mientras nosotras terminamos aquí́ —Le sugiere Michelle.

—Claro, cariño —Besa su mejilla y se encamina a la salida, pero la voz de su mejor amiga lo interrumpe.

—¿Jared, donde está mi marido?

—Recibió́ una llamada y fue a su despacho a responder.

—Ok, permiso —Se encamina a dicho lugar y escucha a su marido hablando en inglés por teléfono. Cuando sus ojos se encuentran con los de su esposa, se despide rápidamente. —¿Está todo bien?

—Sí, cariño —Se acerca. —Muero de hambre.

—El almuerzo ya está listo, vamos —Lo toma de la mano y lo arrastra al porche trasero donde ve a sus hijos y amigos comiendo alrededor de la mesa. —Gracias —Le dice a su esposo antes de que pueda acercarse a la mesa.

—¿Por qué?

—Por ir detrás de mí cuando estuve a punto de abandonar todo, no sé qué hubiese sido de Amely y Destiny sino lo hubieses hecho —Acaricia su mejilla. —Gracias por no dejar de amarme...

—Siempre te amaré —La atrae a sus brazos y la obliga a levantarse un poco para besar sus labios. —Gracias a ti por acceder a casarte conmigo por primera vez hace diez años —Susurra cuando sus labios se separan aunque no es por mucho ya que rápidamente la castaña vuelve a besarlo.

—¡Qué asco! —Chilla Amely cruzando por su lado en compañía de Samantha.

—No dirás lo mismo cuando crezcas —Le dice su madre ganando un pellizco por parte de su marido.

—Mi bebé nunca tendrá novio —Advierte antes de salir al porche.

—Iré por el jugo —Anuncia Athena entrando nuevamente en la habitación. Sin saber por qué, su mirada va a la bandeja de correspondencia, se acerca allí y toma una carta con dirección de México. Rompe el sobre y desdobla la carta para comenzar a leer reconociendo inmediatamente la letra en el papel.

''Querida Athena, sé que te sorprenderá que sea yo quien te escriba, pero no te imaginas mi sorpresa al saber lo tanto que ha cambiado vuestra vida. Supe que estás casada, que tienes cuatro hijos y que eres una exitosa doctora, y me alegro como no tienes idea.