Historia de Doña Barbara que inicia en el capítulo 62 minuto 19:05. Otro final con escenas de la telenovela y mías propias donde el amor se mezcla con la venganza, los celos y la obsesión.
Santos decide enfrentar lo que siente frente a su familia y...
- El nada. Ya reviso la casa grande, váyase con sus hombres a los proteros y al canai. Limítese a buscar revoltosos- dijo Santos haciendo que Meléndez se levantará poniéndose muy cerca de el. Su tono no le gusto nada
- Menos Luzardo, recuerde el pasado. Hace 20 años un hombre fue tan valiente como usted y acabo con un tiro en pleno corazón. Quiere acabar igual?- dijo Meléndez amenazándolo abiertamente. Tiro en pleno corazón? 20 años? Ese tipo era uno de los cinco violadores de Bárbara dijo mentalmente Lorenzo
- Atrevete y el que acaba cómo el eres tu- dijo Bárbara desde detrás de Santos dándole la vista perfecta a Meléndez de como se tocaba su pistola en señal de que como el desefundara ella también lo haría. La guerra había comenzado
Mientras tanto en la Sandovalera.....
Genoveva leía uno de los poemas del libro. Pajarote estaba a su lado mirándolo con cara melosa. Maldita sea, la chica se sabía el poema casi de memoria, lo que no sabían es que Josefina se los recito hace unos días embobada porque Andrés se lo leyó y por eso se sabía buena parte de el:
- Anoche cuando dormía soñé, bendita ilusión que un ardiente sol lucía dentro de mi corazón- dijo Génova cerrando el libro- Me encanta este libro mi amor. Eres tan romantico- dijo dándole un beso en la mejilla a la vez que su abuelo los separaba. Guerrero se disculpó
- Dejen ya los besos. Esta ya satisfecho teniente?- dijo Melesio mirándolo tras mirar a la pareja en ciernes
- Disculpen las molestias. Muchachos acabaron?- dijo llamando a los de la casa. Estos dijeron que si- Nos retiramos pues
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- Cínico, abusivo, animal- dijo Genoveva pegándole una cachetada a Pajarote nada más ver irse a los policías
- Genoveva ya, lo hizo para salvar a los muchachos. Andrés se debió dejar el libro en la casa- dijo Josefina reteniendola junto a Altagracia
- Ya si, ya se pero no hacía falta que me besara. Haber dicho que se los recitabas a Federica, la de las cosquillitas- dijo Genoveva enojada mirándolo
- Ay ya, PERDON, PERDON, PERDON, pero tu nombre fue el primero que se me vino a la cabeza cuando los vi con el libro en las manos- dijo Pajarote igual de alterado
- Pues no te perdono idiota. Además porque dices que mi nombre fue el primero que se te vino a la cabeza?- dijo Génoveva interrogandolo
- Porque me caes tan mal que te tengo aqui- dijo señalándole la lengua- en mi punta de la lengua- dijo Pajarote recibiendo otra cachetada de ella
- Pues tu me caes más mal a mí, baboso- dijo Genoveva entrando a la casa soltando improperios mientras su abuelo sonreía. Entre esos dos se cocia algo
Mientras tanto en Altamira.....
Las miradas ardientes seguían entre Santos, Bárbara y Meléndez. Lorenzo intento poner paz entre ellos:
