Gaara es un estudiante de universidad algo reservado, casi siempre pasa desapercibido; gracias a esto se convertirá en el blanco fácil de dos jóvenes los cuales le harán pasar un mal rato jugándole sucio... Esto se trata de una apuesta entre Lee, Ne...
En un lugar del mundo estaba Neji sentado con el celular en la oreja, enojado, frustrado y confundido.
-- ¿Hicieron lo que ordené? -- las personas con las que hablaba no eran nadie importante, solo dos jóvenes que querían ganar dinero fácil a costa de malas acciones.
-- ¿Te refieres a la carta? --.
-- La carta y la advertencia a Gaara ¿Lo hicieron o no? Paso de rodeos estúpidos hablen de una vez -- los suspiros por ambos jóvenes en la línea impacientaron a Neji.
-- Yo hice la carta, y mi compañero la advertencia -- el castaño sonrío complacido -- según lo que me informaron hice llorar a Gaara con esa carta --.
-- Perfecto ¿Y el otro, le comió la lengua el ratón? --.
-- Yo le dije cosas sobre Lee, malas en su mayoría ¡Hasta tuve que inventar que lo conocía! Espero se haya tragado el cuento ese pelirrojo. Te seré sincero... No se si me haya creído -- la sonrisa maliciosa de Neji había desaparecido ¿Les había pagado para nada?
-- ¡Agh, no tenías que involucrar tanto a Lee! -- suspiró -- El otro de la carta lo hizo bien, con que llore me es suficiente. Al ver los resultados no volveré a pagarles ni a contratarlos para trabajitos, haré todo por mi cuenta -- los chicos iban a protestar pero Neji siguió -- cuidadito y hablan de esto con alguien, de hacerlo voy a encontrarlos y les voy a dar la paliza de sus vidas, incluso haré que los expulsen, solo quiero que sepan quien tiene más poder --.
-- Tengo una sola duda -- comentó uno de los muchachos, el de la carta.
-- ¿Qué es lo que quieres perdedor? --. A decir verdad Neji estaba exhausto de la inutilidad de esos dos, solo quería colgar para planear como arruinar la relación de Lee.
-- ¿Por qué te empeñas en joder una relación? Nos contrataste para molestar al de cabello rojo, incluso nos pediste escribir la carta más hiriente ¿Qué es lo que buscas? --.
-- Eso no te debe interesar, yo a tu amigo y a ti les pagué para que lo hicieran, no para que se metan como viejas chismosas en mis asuntos personales. Puedo llegar a ser muy peligroso, puedo joder tu vida y tu carrera, así que cállate y mantén la cabeza gacha -- mientras decía todo esto apretaba el celular con fuerza, lejos de su superioridad camuflada se sentía impotente.
-- Hermano relájate, hicimos tu trabajo, que no haya salido como esperabas no es culpa nuestra. Mejor para nosotros, no queremos por jefe a alguien como tú. Si dices algo de nosotros no nos quedaremos callados ¡Vamos a decir la verdad! ¿De verdad te conviene joder nuestra vida? -- Neji colgó el teléfono rabiando, le era imposible creer que había caído tan bajo, ser amenazado por personas inferiores a él era terriblemente vergonzoso.
Llamó a Lee, nunca contestó... De todos modos ¿Qué le diría? Ahora más que nunca sentía odio por Gaara, un odio incontrolable ¡Por su culpa se estaba sintiendo así! Según sus planes Lee se acostaría con Gaara sin sentimiento alguno, le daría las fotos y él pasaría un buen rato burlándose ¡Aún con todo esto planeado nada salió como quería! Su mejor amigo del cual estaba enamorado sentía cosas por su víctima de juego... Esos no eran los planes.
¿Qué podía tener Gaara? Lee jamás mostró interés por él nunca, era como si no existiera y en cuanto comenzó la apuesta el pelinegro había caído rendido ante Gaara como la abeja con la miel ¡Era tan ilógico! Sus ganas de gritar se hicieron presentes, debía divertirse, quería hacerlo ¿Y qué pasó? Terminó rabiando como inútil sin su mejor amigo al lado.
Ya encontraría una manera de hacer que Lee se decepcionara de Gaara, no pararía hasta ver que terminen mal... Lo necesitaba más que nada.
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-- Estoy realmente agotado -- La pareja de jóvenes caminaba casi a rastras con las mochilas algo húmedas debido a que cargaban con los shorts que usaron al nadar -- Me encantó pasar contigo esta tarde ¿Sabes? Aún puedo sentir que estoy en el agua -- Lee lo detuvo de la mano mirándolo a los ojos, había estado pensando bastante en lo que había pasado, En porqué su novio había llorado tanto... Casi de manera desconsolada, incluso en esa carta que sostenía, todo era tan confuso.
-- Quiero que me digas algo -- Gaara asintió poniéndose un poco más serio.
-- adelante Lee --.
-- ¿Alguien a parte de esa carta te lastimó? -- sin duda un tema delicado, Gaara estaba confuso ¿Debería decir la verdad? Si la decía Lee se preocuparía... No quería causarle problemas, no más con los que ya cargaba.
-- No... Solo la carta -- lo acercó un poco más hasta poder sentir su respiración -- Te digo la verdad --.
-- Sabes que cuentas conmigo, mientras yo esté en la universidad, mientras yo sea tu novio, nadie, escucha bien, nadie deberá lastimarte ¿Entendido? De hacerlo se las verá conmigo. No eres ningún estorbo, ninguna carga, eres mi pareja y debo cuidar de ti -- el pelirrojo abrazó a Lee poniendo su cabeza en su pecho, mantenía los ojos abiertos escuchando como el corazón de Lee latía contento.
-- Sé que puedo contar contigo -- siguieron su camino agarrados de la mano, pronto sería su salida así que Lee estaría ocupado, quería tener el mejor tiempo posible junto con Gaara.
-- Vamos a estar juntos en una cabaña ¿Te emociona la idea? A mi si, digo... Tiempo para nosotros dos solos -- Gaara se sonrojó ligeramente volteando hacia Lee.
-- ¿Eso qué significa? -- la mirada del azabache había cambiado, tenía un ligero brillo, pero podía transmitir ansias, deseo.
-- Dime ¿Qué quieres que signifique? --.
-- ¿Dormir juntos, abrazados? -- Lee rió levemente con un rubor en sus mejillas, al parecer el menor no captaba las indirectas rápidamente.
-- Puede ser ¿No encuentras otro motivo? -- .
-- No, debes ser más claro -- esta vez se puso algo serio, ¿Debería ser indiscreto con Gaara? Tal vez mantener la compostura sería útil ¿Por cuánto tiempo?
-- Ahh, solo pensaba de más, no te inquietes --.
-- Bien, supongo que entonces está bien. No me quedaré callado esta vez, si quieres hacer algo más conmigo tendrá que ser sin interrupciones ¿Recuerdas aquella vez donde tuvimos que detenernos por una llamada? -- el mas alto asintió apretando con algo de fuerza las correas de su mochila, sentía interés por saber como es que Gaara logró comprenderlo tan rápido.
-- Claro que lo recuerdo, me enfadé un poco cuando eso ocurrió --.
-- Espero que estando solos en una cabaña nadie pueda interrumpir. Tengo que confesarte que nunca antes he intimado con nadie, menos con un chico... Me gustaría que esa ocasión, la primera en mi vida fuese especial --.
-- Va a ser especial, no te preocupes -- Sin más que decirle Gaara suspiro con un poco de nerviosismo, estaba feliz y a la vez curioso, la idea de hacer el amor con su pareja lograba ponerlo algo ansioso
En un punto de la caminata se tuvieron que desviar cada uno a su casa, se despidieron con un beso lento, un abrazo y varias palabras de amor, sentían emoción por el viaje y por saber que en éste mismo consumarían una prueba de su amor muy importante. Nada podría traer consecuencias.
