Ben estaba acostandose, ya quería quedarse dormido, siempre soñaba lo mismo, que conocía una hermosa mujer en un restaurante.
Era al aire libre, el la veía en la entrada y ella lo veía y le sonreía, entonces se sentaban en la misma mesa y hablaban de muchas cosas, algunas que la hacían reír y el podía ver qué su sonrisa era lo más hermoso que hubiera visto.
Era tan real que incluso podía oler su fragancia floral y agarrarle la mano, ella sólo lo veía.
De pronto sentía que se alejaba de ella y entonces despertó, tenía que averiguar si ella era real.
Al día siguiente que ya era casi navidad, tomó un vuelo a Londres al que llegó en la noche, se sentía nervioso, no sabía si ella era real, pero al menos quería conocer el lugar.
Al día siguiente llego al restaurante, se sentó en la misma mesa de sus sueños y ordenó el desayuno, en eso estaba cuando de pronto una voz lo hizo voltear.
-Hola.
Cuando la vio sintió que se paralizaba y no podía hablar. Trago saliva y le dijo:
-Hola.
Ben no podía creerlo, era la chica de su sueño, de pronto salió de su ensoñación y le pregunto:
-Quieres sentarte?
-Claro.
Rey lo miró y le dijo:
-Hola, soy Rey.
-Soy Ben.
Y Ben sonrió pues su sueño se había hecho realidad.
Crearé estás historias de Ben y Rey, espero que les gusten, esperen la siguiente.