Jania y Jacen.

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Rey se estaba moviendo mucho en la cama, no podía dormir; Ben se despertó y le preguntó:

-Estas bien cariño?

-Sí, es que no puedo dormir.

-Tranquila, quieres que te preparé un té!

-De acuerdo, voy al baño.

Pero cuándo llegó al baño su fuente se rompió y dió un gritó. Ben entró corriendo, la miró y le dijo:

-Vamonos, es hora.

-Ben, tengo miedo.

-Tranquila.

La cargó, la puso en la cama y le puso un pants y una playera, nueva ropa interior; la volvió a cargar y la llevó al auto; regresó a la casa, agarró a Rosie de la mano y la maleta en la otra y le dijo a la pequeña:

-Vamonos hija, hay que llevar a mamá al hospital.

-Mama...

-Sí, el bebé va a nacer, vamos.

Cargó a su hija, cerró la puerta y se metieron al auto; esté empezó a manejar y le preguntó:

-Qué paso cariño, ya viene, respira.

-Apurate por favor.

-Esta bien.

Cuándo llegaron al hospital, les dijeron que estaba lista para dar a luz pero que el bebé venía volteado así que tendría que hacerle una cesárea. Rey miró a Ben asustada y esté la tranquilizó:

-Calma cariño, todo va a estar bien.

-Ben...

-Tranquila.

Le dió un beso en la frente y se la llevaron. Rose llegó enseguida y el le contó todo. Ella lo escuchó y luego le dijo:

-Tranquilo, todo va a estar bien, ya verás.

Después de un buen rato salió la doctora y le dijo:

-Quiere pasar señor Solo.

-Ya nació?

-Pase y véalo.

Ben entró a la habitación y Rey lo llamó:

-Ben, pasa, míralos.

En cuánto se acercó vió a dos bebés hermosos y gorditos dormidos en la cunita, volteó a ver a Rey y dijo:

-Cómo!

-No lo sé, pero eran gemelos.

Esté se quedó pensando y le propuso:

-Qué te parece Jaina y Jacen.

-Son perfectos.

El sonrió y la abrazó dándole un beso agradeciendo de que los tres estuvieran bien.

Otra actualización.

Saludos.

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