Jisung despertó a toda prisa, levantándose de un salto debido a la hora, las 07:45, lo cual era realmente tarde teniendo en cuenta que debía estar en la escuela para las 08:00.
Se puso su uniforme planchando con las manos la camisa al no tener tiempo de hacerlo como se debe.
Bajó las escaleras rápidamente mientras seguía colocándose la corbata y corrió a la cocina, tomando una tostada del desayuno de su hermana, un momento... ¿Su hermana?
—¿Qué demonios haces aquí todavía?, ¿No deberías estar en la escuela a esta hora también? –preguntó Jisung aún con la tostada en la boca mientras acomodaba su corbata y saco–.
—¿Tu no deberías estar allí también? –contraatacó la rubia–.
—Yo pregunté primero.
—Se murió el familiar de mi profesora y está de luto, no tuvieron tiempo de poner una suplente así que no tengo clases por hoy –respondió Minjeong mientras se servía un poco de jugo de manzana– ¿Y tú?
—Voy tarde –dijo el más alto tomando su mochila y sus llaves, aunque justo cuando iba a salir de casa, un grito proveniente de su hermana lo hizo parar en seco justo cuando tenía un pie fuera de su morada–.
—¡Maldito!, ¡Ya vi que no tienes el mendigo llavero!, ¡¿Dónde demonios lo perdiste?!
Antes de que su hermana pudiera decir más al notar la ausencia del llavero que le había regalado, el peliblanco salió a toda prisa de su hogar, corriendo en dirección a su escuela.
Casi fue atropellado 3 veces, pero llegó entero.
La noche anterior se había desvelado jugando un nuevo videojuego que había salido, y no fue hasta que su madre escuchó ruidos raros en su habitación y fue a abrir, que lo encontró despierto frente a su computadora, con los ojos fijos en la pantalla y sus manos moviéndose rápidamente por el teclado, mientras apretaba a toda velocidad una tecla.
Por supuesto que luego de ser descubierto, no solo recibió una tremenda reprimenda, también fue castigado sin poder usar la computadora por 3 meses a no ser que fuera por motivos escolares, y es que, cuando fue encontrado en plena madrugada cual cucaracha, eran exactamente las 06:27 am, por lo que tampoco pudo dormir.
—Llega tarde –dijo el profesor viéndolo entrar rápido como un rayo al salón–.
—Lo siento –se disculpó mientras tomaba asiento en su lugar–.
Un día en la vida de Park Jisung se podría resumir en: aburrimiento.
Absolutamente nadie lo notaba a menos que se tratara de situaciones puntuales, en las que era el centro de atención, cosa que rara vez pasaba –a no ser que llegara tarde– por lo que, era completamente invisible.
Ser invisible tiene sus pros y contras, una de sus cosas buenas era poder hacer casi lo que quería, ya que nadie lo iba a notar, una de sus contras era que, cosas como socializar o ser tomado en cuenta por alguien que no sea uno de sus amigos, era extremadamente difícil, cosa que lo frustraba mucho.
Uno de los únicos momentos del día en el que lo notaban era cuando llegaba tarde o pasaban lista, pero no mucho más.
Mucho tiempo de aburrimiento en clase pasó hasta que el glorioso timbre sonó, indicando el primer receso.
El peliblanco se levantó de su silla, y una vez una parte considerable del salón salió, el también lo hizo, debido a que tenía que encontrar aquel llavero le cueste lo que le cueste si es que no quería quedarse sin cabeza.
Ni bien puso un pie fuera del aula, algo pequeño y liviano chocó con el, y al dirigir la mirada un poco más abajo, se encontró con una chica de baja estatura, con un fuerte sonrojo en el rostro, cabello negro y ojos color miel.
—¿Estás bien? Lo siento no te vi –se excusó–.
—E–está bien, yo... y–yo quería darte esto –dijo en tono nervioso la más baja mientras le entregaba una caja con la cabeza gacha– s–se te cayó el último día de clases y no tuve oportunidad de devolvertelo antes, ehm... v–vi que estaba roto y lo reparé pero me di cuenta de que eso fue imprudente de mi parte l–lo siento si te molestó.
Una ola de alivio inundó su cuerpo, lejos de toda broma con Minjeong, realmente no quería perder su regalo, se lo había hecho cuando Jisung estaba en preescolar y su hermana en primaria, por lo que, lo consideraba un regalo importante al ser un recuerdo de cuando eran pequeños.
—Ah, el llavero, ya decía yo que lo había perdido, gracias por repararlo, Minjeong casi me mató cuando lo perdí, así que gracias de parte de ella también, nos vemos –dijo el más alto dándole una pequeña sonrisa antes de abandonar el salón–.
Realmente ya no tenía nada que hacer fuera del salón ahora que había recuperado el llavero, pero creía que se vería muy poco genial si simplemente volvía a entrar a su curso nuevamente.
⠀⠀⠀
[...]
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Si Jisung creía que su infierno en casa con su hermana ya había cesado, pues estaba muy equivocado.
Al contarle que había recuperado aquel llavero, accidentalmente mencionó que una chica se lo había dado, por lo que ahora estaba siendo intensamente interrogado.
—¿Era linda?, ¿Cómo era?, ¿Quién era?, ¿La conoces?, ¿Era amable?, ¿Qué tan linda era?, ¡Responde, responde! –dijo con emoción la rubia mientras daba pequeños saltitos alrededor de su hermano menor–.
—No sé, no sé, no sé, no sé, no sé, y, ¡No sé! –respondió ya completamente harto el menor–.
—¡Mentira!, ¡Si sabes, pero no quieres decirme!, ¡Habla!
—¡No! –volvió a responder el menor, para luego correr a su habitación–.
Realmente no tenía respuesta para ninguna de esas preguntas, lo único que sabía era que era de su mismo año, y solo lo sabía por el día de la ceremonia de entrada donde los hicieron presentarse, pero fuera de eso, nada más.
No iba a negar que era linda, lo era, y mucho, pero no estaba interesado en una relación llegado al caso, no solo porque le costaría horrores conseguir pareja debido a que casi nadie lo notaba, sino también porque el consideraba que sería un pésimo novio, era demasiado tímido, y cosas como tomarse de las manos, besarse, y demás, le darían muchísima pena y estaría sonrojándose todo el tiempo, cosa que seguramente molestaría a su pareja.
Además, ¡El nunca tuvo pareja!, no sabría como actuar en caso de tener una, ni mucho menos como llamar la atención de una chica ni absolutamente nada, por lo que, seguramente terminaría siendo dejado a los 3 días.
O por lo menos eso pensaba el.
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Puppy Love | Park Jisung
Hayran Kurgu━Amor de cachorros ━dijo su mejor amiga suspirando mientras negaba━ ¿Por qué no le dices a Jisung de una vez por todas que te gusta? ━exclamó ésta vez en tono mucho más alto━. ━¡Cállate! ━se apresuró a decir mientras cubría la boca de su amiga━. Por...