Capítulo Dos

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Encajar con los estereotipos de la sociedad no era algo que Nick pensaba hacer. Sabe perfectamente a que punto puede llegar una persona tan sólo para recibir la aceptación de los demás y así poder ser recibido por todos aquellos que no gustaban de quienes eran diferentes, o quienes sólo eran ellos mismos.

Es por ello que el pelinegro de ojos azules nunca fue bien recibido por sus compañeros de clase en la escuela o alguno en la universidad, al menos no en un principio. Sus primeros meses en ese lugar fueron un completo infierno para su persona, quizás continúan siéndolo, con idiotas molestando y criticándolo, clasificándolo como alguien raro, como si tuvieran alguna clase de poder semejante a un Dios para llegar a hacer algo así.

Por más que ignorara a esas personas, no quitaba el hecho de que fuera molesto.

Sin embargo, sus dos mejores amigos y su buen amigo han estado haciendo su vida universitaria medianamente manejable, por tanto, ha logrado continuar soportando más de toda aquella mierda de críticas y casillas hechas por los populares ineptos.

Las pocas personas que siempre han estado allí para él en las buenas y en las malas le enseñaron que realmente si lo vale, que no importaba todo lo que dijeran los demás, pues al fin y al cabo ellos realmente no conocían quien en verdad era. Tan sólo sus verdaderos amigos saben el tipo de persona que es y lo quieren tal cual, sin necesidad de cambiar nada, es un cariño sincero y eso le hacía sentir bien.

Y es que no importaba cuantas personas dijeran que Nick era alguien callado, ocultando su cuerpo tras sus ropajes holgados y siempre esquivando la atención. Alguien que no gustaba de convivir demasiado con los demás y que hacia lo que quería sin importarle si estuviera bien o mal; esa era la visión de los demás hacia su persona, tratándolo de alguien aburrido o alguien con quien definitivamente no desearías juntarte.

La realidad era otra y eso sólo muy pocas personas lo saben. Nick probablemente fuera aburrido para los demás; sin embargo, Sapnap era todo lo contrario a él.

Sapnap era todo aquello que Nick no se permitía ser en su vida diaria.

El vocalista principal del Dream Team era toda una nueva sensación, capaz de sacudir a cualquiera con su personalidad, justo como una explosión llena de vitalidad. Amado por muchos a pesar de su identidad desconocida y esperando ansiosos el día en que su rostro y vida cotidiana sea revelada al público, un día que la verdad el vocalista cree que nunca pasaría.

¿Cómo reaccionaría el mundo ante el descubrimiento de que el gran e increíble Sapnap era realmente el raro y despreciado Nick que no posee nada de especial? Definitivamente algo como eso no acabaría bien, los raros como él no tenían un lugar en la sociedad, siempre serían dejados de lado sin importar qué y la verdad prefiere mantener las cosas tal y como están, no quiere más desastres en su vida.

Mirando el lado bueno, realmente no era complicado mantener todo aquello en secreto, después de todo no es cercano a las personas en su vida cotidiana aparte de sus buenos amigos, con quienes manejaba el hecho de mantenerlo en incógnito, después de todo, ellos igual eran parte de la banda. Y en su vida como artista mucho menos requería de preocuparse por inventar excusas o algo para despistar, nadie sospechaba nada y sus dos personalidades eran tan diferentes que nadie podía atar cabos.

Siempre creyó que todo marcharía con normalidad. No llegó a imaginarse la posibilidad de que alguien podría descubrirlo, mucho menos alguien como él.

El día transcurrió con normalidad para Nick, viéndose como siempre involucrado en alguna pelea, tachado como agresivo a pesar de ser quien recibía los golpes que se esconden bajo su sudadera blanca, acabando por ser castigado y saliendo tarde de la institución. Si, ese era su día a día fuera de su mundo como artista; simplemente no podía quedarse callado a pesar de conocer su destino al involucrarse en asuntos que no le incumben.

Feral | QuacknapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora