Los días continuaron, seguimos viajando sin rumbo fijo, no habíamos encontrado ninguna persona, solo habían rastro donde se notaban que habían hecho alguna fogata, pero solo eso, había animales, algunos salvajes donde al vernos simplemente hacían una reverencia y se iban, me parecía curioso esa actitud, será que los animales saben lo que está pasando...
¿Zero sabe lo que pasara?
Mis pensamientos a veces me nublaban, pero Natsu me hacía reaccionar.
-Oye Lucy, ¿estás bien?- Me pregunto Natsu.
Suspire
-Sí, todo bien, ya sabes, hay momentos en que no sé qué hacer, no tengo ni idea de lo que pasara, si la vida ya era incierta, ahora con este tipo de fin del mundo es peor, la gente se volvió loca, nadie sentido, todos han perdido la razón. Me preocupa cuando se termine la vida humana, ¿nosotros seguiremos con vida? ¿Qué pasara con los animales? Es claro que tomaran los lugares que el hombre le ha quitado a lo largo de los siglos, pero, ¿solo estaremos tu y yo? Bueno, aunque ser los únicos no se me hace mala idea, pero supongo que mi humanidad hace que me pregunte todo eso.
Mis pensamientos me abruman, siento que todo va a empeorar y mejorara en un abrir y cerrar de ojos, estoy muy confundida.-
Natsu me veía mientras caminábamos por una carretera, Zero caminaba a mi lado atento al camino.
-Lucy, los dioses son sabios y toman decisiones tan extrañas que perjudican la vida de todos, incluso de nosotros y eso que nosotros somos un rango muchísimo superior a los humanos.
Es difícil responder a tus preguntas, estar contigo solos, sin nadie me parece una idea fascinante porque no tendría que preocuparme por que alguien te lastimara. Aunque después de que tú misma manejes tus poderes, tus habilidades, etc. Serás intocable, pero, aunque eso pasara, siempre te protegería.-
Lo mire y sus ojos verdes me miraban con atención.
-El fin del mundo apesta. - Me reí y seguí caminando, hasta que vi que Zero se acomodaba pegado a mí y se tensaba, su gruñido hizo que todo quedara en silencio, ni mi respiración se escuchaba.
-Lucy- Asentí a la voz de Natsu, algo pasaba.
De pronto escuchamos gritos. No pude evitarlo, corrí hacia el origen de esos gritos.
Zero venía a la par de mí y Natsu atrás.
Corrí entre árboles frondosos que me tapaban la vista, con cuidado, miré que colina abajo había tres personas acostadas de forma extraña, y dos atrás de ellas, eran hombres corpulentos, con dos armas con silenciador.
-Natsu... los mataron- Seguí observando y mire que uno apuntaba hacia enfrente, mire a esa dirección y observe a una niña correr.
Salí corriendo hacia la niña, no sé cómo pude correr tan rápido, había dejado atrás a Natsu y a Zero en menos de cinco segundos, el sonido del disparo me alerto y sentí como me rozaba la bala.
No llegue a tiempo.
Los hombres me miraron con asombro. Ni siquiera me había notado ni escuchado correr.
- ¡¿Quién carajo eres tú?!- gritaron, no pude evitar ignorarlos y mirar a la niña, quien se hallaba en el suelo, con un disparo en la espalda.
Corrí hacia ella y mire que aún estaba consiente.
- ¡Niña! No te duermas, ¡no te duermas! - la levante y sus ojos me miraron.
- ¿Mami? - su voz entrecortada me rompió.
- Si mi amor, soy mami. Por favor no te duermas... - Mis ojos se llenaron de lágrimas inevitablemente.
- Mami, me duele la espalda. – No pude moverme. Sus palabras me dolieron en el alma.
- Mami, ¿puedo dormir un poquito? – su voz se estaba apagando.
-Si pequeña, cuando despiertes estarás conmigo...- Sus ojitos se cerraron y su cuerpo comenzó a tensarse.
A lo lejos seguía escuchando como me gritaban los hombres.
Con el rabillo de mi ojo pude ver como se acercaban corriendo hacia mí. Sentí el último suspiro de la niña y mi cuerpo se llenó de rabia.
Los hombres me apuntaron y en un segundo frente a ellos estaba Natsu.
- ¡Miserables! ¿Cómo pudieron hacer esto? - Rugió y los árboles se azotaron.
- ¡Lamentaran haberse metido en nuestra cacería! - bramo uno de ellos, seguía abrazando el cuerpo de la niña, mis lágrimas seguían como si en realidad hubiese sido mi hija.
-Tu, estúpido niño, quítate o te doy un tiro en la cabeza- Escuchar eso me hizo sentir un gran escalofrió, sentí que todo subía y comenzaba a tener sentido este fin del mundo.
-Los únicos que van a desaparecer para siempre y no quedara rastro de nada, serán ustedes. - El sonido del disparo me alerto y en seguida esa sed de venganza y protección floreció de un zarpazo.
Una gran burbuja encerró a Natsu y a mí, el color dorado resaltaba en ella, las miradas de asombro de los hombres fueron evidente cuando el otro tipo saco una nueva arma y comenzó a dispararnos sin piedad. Las balas se perdían en ese campo de protección.
Mi mirada se nublo y pude sentir ira, enojo, quería matarlos.
-Natsu, te ordeno que los mates de la manera más dolorosa. - No supe como salieron esas palabras de mi boca, ni por qué Natsu parecía tener una cadena unida a mí.
-Como ordenes, Lucy- su voz era mecánica.
¿Qué carajos está pasando aquí?
Natsu cambio, su cuerpo se llenó de fuego negro y solo se miraban sus ojos rojos brillando, haciendo un gran contraste ante toda su obscuridad.
Todo fue muy rápido, los atravesó y al final los despellejo, tirándolos para después quemarlos hasta dejarlos en nada.
Sentí algunas lágrimas caer de mis ojos encima del cuerpo de la niña y extrañamente, observé como este se iba desvaneciendo dejando una estela de luces doradas.
"Gracias"
Escuche como un susurro a mi oído.
Una parte de mi seguía consiente de que había hecho un campo de protección, le ordene a Natsu, Natsu siguió mis órdenes, estamos unidos por una cadena y por ultimo mis lágrimas hicieron que el cuerpo de la niña se desvaneciera.
¿Qué mierda acabo de hacer?
Nota:
¡Muchísimas gracias por sus felicitaciones!
Me sorprende como va tan rápido el tiempo, pero un año mas estoy con ustedes, ahora tengo 23, creo que inicie en Wattpad como con 16 años jajajaja me siento una ancianaaaa!
Se acuerdan cuando Wattpad era chido y no había comerciales? Era genial, ahora no esta chido eso.
Nos vemos prontoooo!!!