Capítulo 11 - Loco Halloween (+18🔥)

817 68 28
                                    

Se veía muy hermosa y libre. Su pelo marrón y tan lago como el mío, su piel brillando con la luz de la luna y sonrisa amorosa con una profunda alegría de verme.

—¡Tara!

—¿Mamá? —estaba algo confundida pero al ver que era ella grite de emoción —¡Mamá!

Ella corrió hacia mí rápidamente y se lanzó en un abrazo. Mis ojos estaban brillando y con lágrimas de emoción por verla parada frente a mí.

—Tara. ¿¡Qué haces aquí!? —hablaba con pánico en su voz —¡Tienes que irte ahora mismo! Lo liberarás.

—¿Qué pasa?

—Tara vete. ¡Ahora!

La voz de mamá se mezcló con una masculina que se me hacía familiar.

—¡Tara! ¡Abre los ojos por el amor de dios! —abrí los ojos, vi la cara de Aaron y él me estaba sosteniendo de la cintura para arriba en sus brazos mientras estaba tirada en el suelo y el arrodillado junto a mí —Gracias al cielo, los abriste. —sopló aliviado y me abrazó con tanta fuerza que apenas respiraba.

Una vez que dejé de ver todo dando vueltas él me soltó y me ayudó a ponerme de pie. Me senté en una piedra para recomponerme.

—¿Qué sucedió?

—Casi me matas de un susto Tara. —su voz se notaba lo preocupado que estaba.

—¿Por qué? ¿Qué sucedió?

—Tara. ¿Estás bien? —dijo Max caminando hacia nosotros luego de haber visto a Magnus y apoyó una mano en mi hombro.

—Sí Max, estoy bien. ¿Cómo está Magnus? —miró hacia él y volvió a mirarme.

—Está bien, algo golpeado nada más.

—Que bueno. —suspiré aliviada y saqué su mano de mi hombro —Aaron. ¿Qué pasó? —no tenía la necesidad de hablar con Max en ese instante.

—Cuando abriste tus ojos en violeta Magnus se volvió loco y te quiso detener pero no lo escuchabas. ¿Qué pasó?

—No sé, abrí mis ojos y vi un bosque. Este bosque pero no se veía así. Era más oscuro y había kitsunes por todas partes. Mamá estaba ahí y se acercó a mí.

—Fuiste al bosque sacro eso es normal pero acá te veías como poseída, todos los elementos comenzaron a dar vueltas a tu alrededor y Magnus te quiso parar pero lo lanzaste con fuerza. Como si fuera tan pesado como una pluma.

—Eso no es todo, cuando la vi nos abrazamos y me sacó de ahí, mejor dicho me echó de ahí. Se veía aterrada.

—¿Por qué? Eso es muy inusual, ellos no se comunican con nosotros. —dijo Max mientras me escaneaba preocupado.

—¿Qué está pasando?

—No lo sé Aaron, pero voy a averiguarlo.

Me paré bruscamente algo mareada y me dirigí a Magnus que estaba a unos metros junto con otros que lo fueron a ver. Aaron me acompañó para descubrir lo que pasaba, me puso una mano en mi antebrazo y me ayudó a mantenerme de pie junto con la otra que estaba en mi cintura. Seguía algo desorientada.

—¿Qué pasó? —dije preocupada.

—Ustedes díganme, me dijeron que eras de tormenta. —miró a Max y a Aaron.

—Lo soy.

—No, no lo eres.

—¡¿Qué?! —dije con preocupación.

—Tus ojos violetas.

—¿Qué tienen?

—Son muy raros, tal vez unos uno o dos cada cien años o más.

Kitsune: El nogitsune Parte 1 y 2 (+18🔥)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora