All I Want [Español]

(6) Ya vete a dormir, criatura

Ellie

Cerré mi casillero con fuerza y saqué mi uniforme algo molesto. Tenía mil cosas en mi cabeza, mil problemas y unas cuantas palabras en mi cabeza, grabadas, como si de un tatuaje se tratara.

Tatuajes...

—¡Mierda! —Quise golpear mi cabeza con la taquilla, pero si no fuera porque todos los estudiantes tuvieran sus ojos directamente en cada movimiento que hacía. Por supuesto que lo hubiera hecho.

Reprimir mis problemas de ira no era nada fácil. 

Había pasado una semana desde la fiesta de bienvenida que había dado la señora Jessica, y, después de esa pequeña discusión preferí bajarle de volumen a mi tono al hablar en los videos, además de que, de alguna forma sentía algo en mi cabeza que me decía y repetía:

Le va a contar a todos...

Y claro que eso era vergonzoso de si quiera imaginarlo, ¡Los videojuegos eran para perdedores! Igual que los libros, matemáticas, ajedrez y más hobbies que la gente aburrida tenía. Toda la preparatoria repitiendo mis jugadas, mis malas rachas, mis saludos.

Principalmente la idea de que la más popular fuera un tipo de jugadora de lol me hacía ver humillante. No hace falta explicar porqué me daba vergüenza, ¿no?

Y si mis amigos se enteraban...

Clarie criticando cualquier cosa de mí...

Alex riéndose de mí...

Jason avergonzado de mí...

Apreté mis dientes con fuerza y cerré los ojos tratando de quitarme esa imagen mental. Caminé por el pasillo hasta encontrarme con la figura del rubio Chris, quien miró su reloj impaciente.

—¿De qué querías hablar? Tengo que ir al gimnasio en diez minutos para entrenar con Thompson.

Coloqué mis dos manos en mis caderas—Chris, necesito un favor que debí pedirte hace mucho.

El chico elevó una de sus cejas intrigado. La chaqueta de futbol americano del equipo le lucía demasiado, el tipo era demasiado atractivo, y además futbolista; todo por lo que cualquier persona querría al ver una película americana, o al menos, es como nos pintan a todos.

Atractivo, pero tonto y muy fácil de manipular.

Él no tenía oportunidad conmigo ni, aunque lo hubiera intentado desde el principio de la secundaria.

—No sueles pedirme favores, Ellie—Entrecerró los ojos—. En realidad, dudo mucho de lo que estás por pedirme.

Chasqueé el chicle en mi boca tratando de liberar la tensión.

—Seré directa—Solté un respiro—. Necesito que convenzas a Jason de introducir una chica al equipo de basquetbol. Había otra que quería estar en el tuyo, pero...digamos que se arrepintió.