Dormir en un barco hecho de manera, que anda por el océano no es mi lugar favorito a decir verdad.
Pero lo justifico con ver el amanecer, era hermoso, los colores del cielo se reflejaban en el océano creando una armoniosa perfección.
Aunque lo perfecto estaba sobrevalorado.
—¿Observas el océano o piensas?— mire a mi izquierda donde Aden se encontraba.
—Ambas.
—¿Puedo saber en qué divaga tu hermosa mente?— declaró mirándome.
—¿Como se relacionan en tu isla?— pregunté mirándolo de reojo, una sonrisa apareció en su rostro.
—Buena pregunta, por lo que vi en Kihi solo existen las relaciones entre mujeres, en mi isla solo existen las relaciones hombres con mujeres — explicó
La sexualidad de Kihi para la isla de los tritones estaba mal y viceversa.
—Creo que es una estupidez tan grande— murmure, la diferencia es que esta vez lo enfrente.
—Yo creo que tú debes cambiar esa estupidez—Aden miró el océano luego el timón, no había nadie manejado el barco habíamos parado para descansar.
—Tenemos unos veinte minutos antes de que despierte Asher, así que ven— declaró para después saltar, vi cómo caía en el agua.
Nadie podía detenerme, ya no era ilegal.
Mire a todas partes, luego solo me saqué mi vestido y salté, el agua alrededor de mi cuerpo se sentía extremadamente increíble, como si fuera la primera vez que la tocará.
—En mi isla las mujeres no se desnudan — declaró Aden apartando la mirada.
—Créeme se pierden de mucho.
Vi cómo sonreía, lo cual me hizo creer que si tenía sentimientos.
—Supuse que anoche no viste lo qué pasa cuando te metes en el océano— declaró sumergiéndose.
¿Que no estaba viendo?
Me sumergí, veía peses y criaturas marinas, el mar era asombroso, me encontré con la mirada de Aden, de alguna manera tenía una aleta del color rojo fuego...
¿Acaso?
Mire mis piernas encontrándome con una aleta negra, nunca antes había visto algo así, de verdad era una sirena.
—¿Entiendes porque está prohibido bañarse en el océano?— aunque hablo debajo del agua le entendí perfectamente como si no existiera una muerte segura entre nosotros.
— Saben que todas las Anfinitas simplemente se marcharían— murmuré
—Exacto sirenita
—Wow de repente volviste a ser un idiota— declare con una bella sonrisa y volver a subir a la superficie.
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Kihi
Short StoryGracias a una guerra las sirenas evolucionaron hasta las Anfinitas, sirenas de la tierra, estas mujeres no tienen cola sino que piernas con algunas escamas. El mar es prohibido para estas hermosas mujeres pues ese es el territorio de los tritones y...