La valentía no es algo que nace dentro nuestro, en verdad es algo que nunca logramos alcanzar, solo sabes que debes despertar levantarte y continuar.
Continuar contra viento y marea eso es ser valiente, respirar para simplemente disparar.
—Lee— declaré mirándola, los hermanos habían establecido entrenamiento todos los días.
Yo había decidido que entrenaría solo con Lee, ella era la única que me podía mantener cuerda.
—¿Sele?— ella se levantó rápidamente de su asiento y me agarró del hombro, estaba asustada de que algo me hubiera pasado.
Pero si me había pasado algo.
—¿Recuerdas quien eras antes que el mundo te dijera cómo ser?
Y aunque su mirada transmitía lastima sabía que en verdad no la sentía.
¿Acaso existía alguien que me comprendiera más que ella?
No, la respuesta era fácil y sencilla.—No no lo recuerdo porque no es importante— declaró acariciando mi hombro con amabilidad.
—Detesto que me digan que debo hacer— declare mirando el agua.
—Algunas veces necesitamos una guía para entender ser que es lo que tenemos que hacer.
Asentí suavemente y volví a concentrarme en el agua, Lee también estaba concentrada en esta por si la movía, lo intente por horas pero nunca lo logre.
—Estoy exhausta— declare apoyando mi cabeza en la pared que tenía atrás.
—Selene lo hiciste— esas palabras me sorprendieron mire rápidamente el agua en el bollón y si lo había hecho, pero no sabía cómo lo había logrado.
El agua creaba una columna que se mantenía en el aire, como si quisiera que fuera así.
—Desármate— declare para que el agua hiciera lo que le estaba ordenando.
Y si funciono creando en nuestras caras una gran sonrisa.
—Le iré a decir a los hermanos...
—Vamos— la voz de Lee sonaba decidida, agarro mi mano y me jalo por todo el barco.
Puedo decir que me tropecé ciento de veces, Leia no era la persona más cuidadosa pero al final logramos llegar a donde estaban los hermanos.
Asher sostenía el timón en silencio mientras que Aden se reía de algo que claramente nos habíamos perdido.
—Pero miran a quienes tenemos aquí, a la sirenita enojona y a su compañera— declaro Aden con una sonrisa.
Rápidamente mi mirada viajo a Asher.
—No Selene no lo puedes golpear...
—Malvado— declare cruzándome de brazos, Aden me miro con cara de burla.
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Kihi
Short StoryGracias a una guerra las sirenas evolucionaron hasta las Anfinitas, sirenas de la tierra, estas mujeres no tienen cola sino que piernas con algunas escamas. El mar es prohibido para estas hermosas mujeres pues ese es el territorio de los tritones y...