The Little Baby Luigi.

013

Los días pasaban, tanto tiempo desde que Luigi fue secuestrado por un científico.
Nadie ha sabido nada al respecto de Luigi desde entonces.

Justo ahora, el Profesor Esteban estaba mirando las noticias en la televisión mientras tomaba una taza con café.

Reportero: Ha pasado 1 mes con 1 semana desde que Luigi, el hermano menor de Mario, ha desaparecido.
La policia sigue buscando pistas de su desaparición, pero lamentablemente no han tenido nada por el momento.
El héroe Mario, sigue buscando y buscando a su querido hermano menor, viajando en mundo tras mundo para encontrarlo y atrapar al responsable de su secuestro.
Profesor Esteban: Ja! Nadie sospecha que está aquí, tan simple como el 2+2.

El Profesor Esteban se levanta, tomandose todo su café y apagando la televisión.
En eso, llega el Profesor Collin.

Profesor Esteban: ¿Ya viste las noticias? Siguen buscando a Luigi, y su hermano Mario también.
Profesor Collin: ¿Cuáles son las probabilidades de que lo encuentre aquí?
Profesor Esteban: Simple, 0%.
Profesor Collin: Mario nunca podrá encontrar a Luigi, además, el pequeño ahora está feliz conmigo.
Profesor Esteban: Por cierto, ahora que la mente de Luigi ha retrocedido..
¿Ya no recuerda más a Mario o a alguien que haya conocido antes?
Profesor Collin: Todos sus recuerdos simplemente están bloqueados, yo sólo estoy reescribiendo su vida, pero no creo que pueda recuperar sus recuerdos.
Profesor Esteban: Ah entonces estamos bien.
Profesor Collin: Lo único que me preocupa es que en sus sueños, su subconsciente reviva uno de sus recuerdos.

En eso, ambos científicos escuchan a cierto pequeño llorar desde la habitación.
Un llanto fuerte, un lloriqueo que sólo Luigi haría.

Profesor Collin: Hablando de eso...

El mayor va a la habitación de su bebé, abriendo la puerta y escuchando aún más fuerte el llanto.
Luigi estaba sentado en su cuna, con miles de lágrimas saliendo de sus ojitos, empapando sus sábanas y almoada.
El mayor baja el barandal y saca a Luigi, lo toma y trata de calmarlo.

Profesor Collin: Ssshhhh shhhhhh, tranquilo bebé, ¿qué pasó?

El hombre revisa el pañal de Luigi, pero está seco.
Toma una botella con leche y se la da, pero Luigi simplemente la apartó de su vista de la botella.
Luigi seguía llorando, estaba asustado, eso lo notó el mayor por completo, así que lo meció con cuidado, de un lado a otro, mientras le decía que estaba ahí.

Profesor Collin: Sshhhhhhh shhhhhh.
Ya ya bebé, aquí estoy. No hay razón de tener miedo.
Lo peor ya pasó, estoy aquí para ti bebé.

Luigi poco a poco se calmaba, sólo estaba llorando en silencio, pero siendo consolado por el mayor, sintiendo esas manos grandes acariciando su espalda.
El Profesor Collin recostó a Luigi ya cuando miró que éste se había calmado por completo.
Sin embargo, Luigi estaba temblando un poco, así que el mayor siguió acariciandolo para calmarlo.

Profesor Collin: Ahora bebé. ¿Qué fue lo que pasó?

Luigi no podía hablar ya que aún seguía llorando, pero más o menos se pudo entender lo que estaba diciendo y a medida de que el pequeño se iba calmando un poco.

Luigi: E-estaba... coriendo.... algo me... p-peseguía.... u-un... m-mounsto...
T-también había.... un chico.... era rojo...
T-tú no estabas por ningún lado... tenía miedo... mucho miedo...

Luigi sacó aún más lágrimas de sus ojos, tan sólo recordar esa horrible pesadilla.
El hombre consoló a Luigi, haciendole saber que no había nada de qué preocuparse.

Profesor Collin: Sshhhhh shhhh, tranquilo bebé, sólo fue una pesadilla, nada más. No fue real.

Luigi simplemente abrazó al Profesor Collin, no queriendo separarse de él para nada.
El hombre correspondió el abrazo y ayudó a Luigi a volver a dormir.

Profesor Collin: Toma pequeño, esto te ayudará mucho a dormir.

El mayor le había dado a Luigi un peluche, un peluche algo pequeño.
Era suave, lindo.
Un gatito color negro.

Luigi abrazó al peluche con fuerza y se acostó en la cuna.

Luigi: Gacias Papi.
Profesor Collin: No hay problema bebé.

El hombre se quedó con Luigi hasta que éste se quedara profundamente dormido.
Ya listo esto, él salió de la habitación, dejando a Luigi dormir.

Luigi durmió muy bien en la noche, ya no tuvo más pesadillas desde entonces.