Star Mccall, es lo único que recuerda cuando despierta dentro de una caja.
Una adolescente que llega a un lugar donde las mujeres no existen, y donde tendrá que aprender a vivir rodeada de hombres con las hormonas disparatadas.
Conocerá a personas q...
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AL ENTRAR VIERON A ALBY SENTADO EN LA CAMA con la mirada perdida. Newt y Thomas se acercaron mientras los demás se mantenían apartados.
— Alby, ¿Estás bien? — Le preguntó Newt sentándose a su lado.
— Oye Alby. — Thomas se puso de cuclillas en frente de el. — Alby tal vez encontramos la salida del laberinto, ¿Me escuchas? Tal vez salgamos de aquí.
— ¿Alby? ¿Te... Te encuentras bien? — Preguntó Star llegando al lado de Thomas.
El moreno miró a la chica y luego a Thomas, para luego pasar su vista a los demás en la habitación, en específico a Liam, Theo, Jackson y Kira.
— Ustedes. — Volvió a mirar a Star. — Ustedes son diferentes, son lobos.
Los sobrenaturales ahí presentes se tensaron y se miraron unos a otros son saber que hacer o que decir, cosa que no pasó desapercibido por nadie.
— ¿A que te refieres Alby? — Indagó Gally mirando de forma extraña a los demás.
— Alby, encontramos una posible salida. — Intervino Thomas cambiando el tema. — Tal vez... Tal vez podamos salir de aquí.
— No lo creo. — Murmuró mirando al suelo. — No nos dejarán, no podemos salir.
— ¿De qué hablas? — Inquirió el chico.
— Lo vi todo.
— ¿Qué fue lo que viste? — Volvió a preguntar con sus manos temblorosas.
— A tí. — Respondió mirándolo. — Siempre fuiste su favorito. — Thomas frunció el ceño sin entender. — A pesar de todo, siempre fuiste su favorito, ¿Por qué les hiciste esto? ¿Por qué viniste? — Esas preguntas solo confundieron más al chico.
Unos ruidos extraños junto a bullicio afuera en el área los hizo salir de la cabaña para ver que pasaba. Pero, antes de que Star saliera Alby la detuvo tomándola de la mano.
— Sé lo que son, lo que son todos ustedes. — Le aclaró para volver a su estado de transe dejando a la chica pasmada unos segundos antes de salir.
Veía a todos los larchos correr hacia las puertas con antorchas en las manos,
»¡¿Las puertas están abiertas?!«
La chica llegó al lado de Liam el cual se veía aterrado igual que el resto. Cuando un fuerte estruendo hizo que todos se cubrieran los oídos, en especial los lobos quienes gritaron al sentir retumbar el eco en sus tímpanos, los demás ahí los miraron preocupados y más cuando las siguientes dos puertas restantes se abrieron, las cuales nunca se habían abierto antes. Todo es muy extraño.
