◜ single dad ៸៸ seungseok 🍀

O7

Por fin habian terminado de cenar, habian sido ya dos platos deliciosos cocinados, principalmente, por Seungyoun, ya conocido por su hija como "el gran chef".

—Wow, la cena estaba realmente buena... —halagó Wooseok, sacandole una sonrisa algo tímida.

—Gracias, aunque no es nada excepcional... Bueno, gracias por venir, también.

—Seungyoun, deja de agradecer, yo vendría siempre que haga falta... —miró a SunHee, con un brillito en sus ojos.

—¡Claro! ¡Por qué tu eres el mejor! —exclamó la pequeña subiendose a la silla para abrazar el castaño.

—Oh, me siento tan solo ahora... —puchereó el azabache en broma y comenzó a quitar la mesa, llevandolo todo a la cocina.

Wooseok le ayudó con lo que quedaba y entre ambos recogieron todo en un agradable silencio, hasta que SunHee entro en escena.

—¡Quiero jugar a algo con los dos! ¿Podemos bailar? —dijo la nena, mirando a su padre con los brillitos tipicos de sus ojos.

—Pero SunHee acabamos de cenar... —dijo Kim en un tono suave.

A pesar de que sentía curiosidad por ver al mas alto bailar, el bienestar de ambos era mas importante aún, sentía la necesidad de protegerlos de cualquier cosa, por pequeña que fuera, con tal de que estuviesen bien.

—Podemos jugar a un juego de mesa, tenemos el monopoly, pero siempre pierdo —dijo Seungyoun con indignación en su voz.

—¡Eso es por que eres muy malo! —rió SunHee, mientras huía de su padre la cual termino por cogerla en brazos.

—¡Retira eso, bichillo!

—¡No!

Por su parte, el castaño no podia estar mas sensible, le hacia muy feliz ver que ellos eran felices juntos, aunque de alguna manera quisiese formar parte de un vínculo asi de bonito, asi de importante. Formar parte de ese vínculo especial, con ese alguien tan especial.

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Después de haber encontrado el juego y de haber jugado una intensa partida llena de felicidad y desesperación —más por parte de Seungyoun que de otra persona— acabo ganando Wooseok y segunda quedó la más pequeña.

—¡Lo has hecho muy bien! choca esa —el castaño chocó cinco con SunHee, bajo la celosa mirada de su padre.

—Vosotros dos tenéis un complot contra mi, esto no es justo~~

—Se siente —dijeron entre risas los dos.

Ya era algo tarde, asi que Seungyoun fue a acosar a SunHee mientras Wooseok miraba un poco la casa. Se fijó en que no habia fotos de nadie, si no que habia dibujos, en su mayoria hechos por la pequeña, aunque alguno que otro era del azabache,  sorprendiéndose del talento oculto que tenia para aquello.

—Ya estoy aqui, la pobre cayó rendida... —dijo Seungyoun, acercandose al castaño. —¿Qué cotilleas, mhm~?

—Miraba tus dibujos, son muy bonitos, y los de SunHee tambien, claro que si —sonrió y se giró hacia el mas alto. —¿Nos sentamos?

—Gracias, y por supuesto, todo tuyo —ambos fueron a sentarse y a acomodarse en el sofa, para comenzar a hablar de cosas algo triviales.

Wooseok no despegó su vista de los ojos brillantes y expresivos del mayor. Era algo que los Cho tenian en común, los ojos de ambos brillaban cuando hablaban de algo que les gustaba mucho. La música, pintar, descubrir sitios nuevos, eran cosas que emocionaban a Seungyoun y a las que lamentablemente, no podia dedicarles demasiado tiempo por su trabajo ajetreado. Él se encargaba de la supervisión dd los equipos de música en televisión, y era un trabajo muy largo.