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                                                Que bueno verte por aquí, princesita.


Viernes... Amo los viernes.

¿Por que? No voy a fiestas, ni salgo con amigos.

Pero los viernes mi novela favorita de Wattpad actualiza capitulo y, lo admito, me envició mucho su historia.

Ya solo por ser eso empecé el día feliz, aunque habían muchas cosas sucediendo a mi alrededor, como Jay y su trato. Alexandra y su mal humor 24/7. Eli y Noah con su... extraña situación. Y el ¿Señor? No me quiero acostumbrar a llamarlo así, necesito saber su nombre, aunque ¿volveremos a hablar después de eso?

Bueno, alejé todas esas cosas de mi mente y me quedé con lo bueno. Estoy estudiando en la universidad de mis sueños, en la carrera de mis sueños. Tengo una roomie bastante agradable y  hoy actualizan capitulo de mi novela ¡Nada me quitara el buen humor!

-Pueden retirarse- Dio la orden el profesor de acústica.

Me apresuré a guardar mis cosas y salir del salón de clases para ir a la hora del almuerzo. Pero antes de cruzar la puerta el profesor me detuvo.

-Señorita Johnson, espere un momento.

Retrocedí mi apresurada caminata y llegué hasta el puesto del profesor Andrews. 

Era un señor que rondaba entre los 30 o 40, eso parecía ser. Siempre que daba clases era muy liberador porque se ponía a charlar con nosotros sobre todo lo que daba y muy frecuentemente hacia debates amistosos. Me gustaba mucho su clase.

-¿Sucede algo, profesor?- Pregunté al llegar junto a el.

-Sí. Quisiera proponerte algo.- Comenzó mientras se sentaba de vuelta en su sitio y sacaba unos papeles.- Aquí esta tu examen de ingreso y he revisado que en acústica no tienes ni un solo error.

Me entregó el papel que contenía las respuestas del área acústica y continuo.

-Además, en mi clase esta semana te haz destacado. Hay alumnos que incluso están repitiendo esa clase.-Hizo una seña para que le devolviera el papel y eso hice.- Por lo cual, te propongo avanzar a acústica II, esta clase igualmente la doy yo, pero te estaría avanzando unos semestres.

Mi boca se formó una ''o'' y mi asombro era notable, digo, estas cosas no pasan siempre. Si me lo está proponiendo es porque lo valgo.

No pude evitar esbozar una sonrisa y que en mi estomago sintiera las míticas mariposas, pero en vez de ser por estar enamorada, fue por recibir avance académico. Que por si no lo han notado, es algo muy importante para mi.

-Pero.- Me detuvo antes de empezar a celebrar.- Tendrás que entrar al club de artes para entender mejor todo. Además, te daré un examen que deberás culminar para el lunes y salir con una puntuación mayor a 70%.

Al terminar me dio dos hojas que estaban pegadas por una grapa y llenas de un montón de preguntas que no me detuve a leer.

-De acuerdo.- Sonreí.

El solo esbozó una pequeña sonrisa, como si le enorgulleciera y se centró en su trabajo frente al escritorio.

Entonces salí del salón con una sonrisa de lado. Sí, el día estaba siendo muy bueno conmigo.

Llegué a la cafetería y ubiqué a Lucia y Alexandra en la mesa que estaban siempre.

Me sentaba con ellas todos los días, a Lucia parecía encantarle y Alexandra se limitaba a hacer sus típicos comentarios cada que podía.

Llámame Señor- ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora