Orfanato Mágico

~17~

Todos los chicos de cuarto año marchaban hacia el despacho de Dumbledore, en el caminó se unían demas alumnos, de todos los años.

De Gryffindor, Slytherin, Hufflepuff y Ravenclaw, todos marchando como uno.

Dejando de lado los prejuicios, dejando de lado las rivalidades, sin túnicas ni colores distintivos.

Salían de clase, logrando hacer enojar a sus maestros, obligandolos a seguirlos, armando una redada, logrando protestar contra la injusticia.

Con megáfonos llamaban a los demás, anunciaban, contra Umbridge, protestamos, no dejaremos que humille a nadie más.

Todos juntos, caminando como uno solo, todos juntos haciendo justicia por un chico que estaba en enfermería,  todos juntos hablando por quien no tenía voz.

"¡Motín!" Gritaban.

"¡No dejaremos que gane!" Exclamaban.

En poco tiempo, todo el colegio se encontraba frente al despacho del director.

Los maestros trataban de calmar a los chicos, fallaban en el intento.

Comenzaron a llamar a Umbridge, a pedir su presencia ante ellos, a decirle que no sea cobarde.

Comenzaron a gritar el nombre del director, anunciando que tenían algo importante para mostrarle.

Dolores apareció ante ellos, empuñaba su varita, mientras sonreía. ¿Quién le iba a creer a unos estudiantes, cuando ella era una autoridad?

Albus salió de su despachó, miro todo el revuelo y preguntó amablemente que sucedía.

Hermione Granger pasó al frente, seguida de ella un alumno de séptimo año que iba a Slytherin.

La chica asintió, y el muchacho hizo un elaborado hechizo, sacando de la mente de la muchacha el recuerdo de lo que había sucedido, esforzándose porque Potter solo sea un borrón, y así no humillarlo más.

Luego de que todos vieran con sus propios ojos lo que había sucedido, Umbridge borró la sonrisa de su rostro.

"-¡Eso no es todo!-" había gritado la enfermera mientras llegaba corriendo, luego explicó como es que había torturado a Harry.

"Estoy muy arrepentida" decía la bruja mientras caminaba en reversa "pero todo lo que dije fue la verdad" seguía diciendo cuando se escuchó el grito de Blaise "¡A ella!" Decía.

Un grito de guerra, una alarma, la señal de ataque.

Todos comenzaron a correr a la bruja, la mujer trató de defenderse, pero la desarmaron en seguida, los gemelos Weasley tenían algunas bromas bajo la manga, las cuáles no tardaron en sacar.

Dumbledore sonrió mientras invitaba a los maestros tomar una taza de té.

"-Tranquila, solo serán quince minutos, los niños no la dañaran-" le explicó a una asustada Minerva.

~¤~

Mientras tanto en la enfermería estaba Harry siendo abrazado por Draco.

La enfermera ya había curado la mano del chico, y le había dado una poción para el dolor. Luego se fue de allí a informar lo sucedido.

Los chicos estaban sentados en la cama, uno al lado del otro.

Harry se había tranquilizado, ya no lloraba, pero seguía con su cabeza en el hombro de Draco.

El rubio seguía sintiendo impotencia, mientras acariciaba el suave cabello de Harry, y jugaba con su mano sana.

—Lo siento, por lo de ayer— Susurró el rubio mientras suspiraba.