-No puedes pasarte la vida sanando gente Alexis... Tu tambien tienes problemas, responsabilidades, amigos... novio.
Dijo mi madré mientras levantaba los platos con la comida fría que una vez mas decidí no tocar.
ALEXIS: - Ahora no mamá, por favor...
Dije cerrando la computadora.
Me puse de pie, sintiendo ya solo un leve dolor en la pierna... Me habian quitado los clavos hace unos días y ya podia pisar con ¨normalidad¨.ALEXIS: - Llegaré tarde, te amo.
Dije mientras le daba un beso en la mejilla y salia la habitación.
Afuera de la casa estaba Adam esperandome con el carro encendido, salio para abrir mi puerta, y escuche el grito de mi madre:
PATRICIA: - Asegurate de que coma algo... Otra vez no probó ni un vocado.
Suspiré enfada y cerré yo misma la puerta del carro.
ADAM: -No se preocupe Paty, lo haré.
Dijo el castaño para después subir al auto y conducir sin siquiera mirarme:
ADAM: - ¿Otra vez con eso? Lo unico que vas a hacer es bajar tus defensas, enfermarte Alexis debes estar bien.
Crucé mis brazos a la altura de mi pecho, mientras me mantenia con la vista en mi ventana.
ALEXIS: - Estoy bien.
Dije de forma seca.
ADAM: -No, no lo estas, estas mucho más delgada que la ultima vez que te vi.
Dijo algo exasperado ante mi falta de interes hacia su platica,
ALEXIS: - Nos vemos al menos una vez al mes... ¿Que es lo que quieres? Eso esta en tu mente.
Sentí mi propia voz dolida y amarga... pero no tenia energia para pelear por algo asi en este momento, nos vemos muy poco debido a su internado en el Hospital, y arruinar nuestras salidas con peleas sería lo mas estupido. Preferí no decir nada más.
ADAM: -¿Qué es lo que quiero? No discutir con mi novia... y que no te enfermes... Eso te va a enfermar...
Dijo, después de eso, subí el volumen de la música para después quedarnos en total silencio, hasta llegar a nuestro destino.
Al llegar me quité los zapatos, sentí la arena filtrarse entre los dedos de mis pies, tomé aire fresco y sentí la sal de la playa entrar en mi cuerpo, desde mi nariz...
Cerré los ojos y sentí una pequeña lagrima escaparse de mi ojo... Me puse las gafas de sol y caminé hasta El Spot...
¨El Spot¨ era ese lugar a donde siempre ibamos, lo encontramos hace muchos años, una vieja estación abandonada de salvavidas. De lejos apenas se ven como unos metales en medio de la arena, desde que me fracturé la pierna no habia podido subir, los peldaños eran altos y resbalosos por la brisa.
Adam subió primero y desde arriba me ayudo a subir, nos quedamos sentados mirando las olas, me puse mi cobijita y el de su mochila sacó un par de latas de cerveza, note su sonrisa cansada. Tome la lata con mi mano envuelta en la manga de mi sudadera y la abrí.
Sentí el sol con mis ojos cerrados mientras me quitaba los lentes. Sentía calor en mi piel, en mi rostro, de repente sentí su mano fría sobre la mía, voltee a verlo, parecia estar a camara lenta... Todo, las nubes, las olas, sus ojos, mi respiración, por un instante me sentí en paz.
Por eso me gustaba El Spot, por eso me gustaba ir a esa playa en particular, en esta ciudad en particular, con esta persona en particular...
Tome un sorvo de la cervaza y me reacomode en la base plana de metal, mientras el soltaba el enlace de nuestras manos, dedo por dedo.
Amaba este silencio y él lo sabia, probablemente él lo amaba más que yo. O quiza lo odiaba.
ADAM: - ¿En qué piensas?
Me preguntó, interrumpiendo la película que estaba imaginando de nosotros en ese momento.
ALEXIS: - En nosotros
Dije mientras sonreía, algo sonrojada, para que él soltará una pequeña carcajada sonora antes de volver a mirarme, mientras se reacomodaba los lentes:
ADAM: -Es divertido... En lugar de hablar entre nosotros, prefieres pensar que estamos hablando...Dijo a lo cual reí y le dí un pequeño codazo en el brazo, él río otra vez. Para despues rodearme con su brazo y ver el mar, sentí su calor... lo vi, mientra él estaba admirado con la belleza del mar, del cielo, del momento, reacomodando sus gafas cada cierto tiempo.
ALEXIS: - ¿Tú qué piensas?
Pregunte mientras volvia a beber de mi cerveza y lo miraba nuevamente:
ADAM: - En que me ofrecieron una plaza en California.
Dijo serio. Y mi sonrisa se amplio al escuchar esa excelente noticia, pero al verlo algo apagado a la vez tambien se me cayó la sonrisa.
ADAM: - Si estando en la misma ciudad nos vemos apenas uno o dos días al mes, si me mudo... No sé que pasará.
Dijo serio, sentí un mareo... quizá por la cerveza, no supé que decir:
ALEXIS: - Adam, es la mejor oferta que has tenido, eso era lo que querías...
ADAM: - Lo sé.
Solté como un susurro, pensé en voz alta.
ALEXIS: - ¡Por fin el sacrificio de todos estos años ha resultado!
ADAM: - Lo sé.
ALEXIS: - No lo puedo creer...
Me quedé en silencio pensando en lo que pasaría ahora:
ADAM: Lo sé.
Dijo desanimado:
ALEXIS: - ¿Por eso estamos aquí?
Dije mientras lo miraba con el ceño contraido, estaba confundida, pero a la vez, todo estaba tan claro, miré como asentía mientras veia al suelo:
ADAM: - Mi madre me hizo aceptar la oferta...
Dijo mientras pasaba las manos por su frente, mirando a todos lados, menos a mí.
ALEXIS: - En su lugar también lo habría hecho... Pero... ¿por eso vinimos aquí?¿Me estas terminando aquí...?
Le pregunté con los ojos aguados, a lo qué el soltó una carcajada y una pequeña lagrima sin dejar de sonreír:
ADAM: - ¿Qué? JAJAJA ¡NO!
Dijo mientras seguia riendo nerviosamente a lo cual sequé mis lagrimas con desconfianza, pero a la vez suspiré de alivio:
ADAM: - No podría dejarte jamás... Nunca más.
Sacó nuevamente su mochila y buscó en un bolso muy pequeño.
En ese momento mis ojos saltarón al imaginar lo que estaba pasando... mi corazón casi se salia del pecho.
No puede ser....

ESTÁS LEYENDO
La Excepción.
Genç KurguAlexis es una chica con problemas de ansiedad debido a sus obligaciones y responsabilidades, esta algo obsesionada con el control y la perfección, sin embargo un suceso inesperado volcará su mundo en un parpadeo.