La Excepción.

9.

Llegué a la puerta de mi casa y tome las muletas, me dispuse a esperar el taxi en el porche.

Después de unos minutos mire que un carro se detuvo en la entrada de mi casa, avance hasta el, casi de inmediato salió el chófer y me abrió la puerta trasera para subirme:

ALEXIS: - Buenos días...

Saludé sentándome cuidadosamente:

ALEXIS: - Gracias.

Dije antes de que me cerrará la puerta, él asintió, después se subió y comenzó a conducir:

CHOFER: - A la cafetería del centro ¿cierto?

Preguntó el hombre y yo afirme su pregunta:

ALEXIS: - Sí por favor.

Dije sonriendo nerviosa, para después de unos minutos de conducir en total silencio se detuvo el carro frente a la cafetería, pague la tarifa y salí del auto siendo ayudada nuevamente por el chófer:

CHOFER: - Que le vaya bien señorita.

Dijo haciendo un ademán de despedida el cual correspondí, se fue y entre al establecimiento, me senté en una de las mesas de la pequeña terraza, revise mi teléfono y faltaban 5 minutos para las 9:00, casi de inmediato noté que había otro mensaje de Adam:

ADAM: - Lo siento 🙁... ¿Estás en casa? ¿Comemos algo?😋🥞🥓🍳

Ignore el mensaje y miré a mi alrededor soltando un suspiro:

ALEXIS: - Bien...

Dije tratando de bajar mis nervios, acomodandome el cabello detrás de la oreja, tome el menú entre mis manos y empecé a ojear las bebidas, pocos segundos después se acercó un mesero hasta donde estaba:

-Buenos días y bienvenida, ¿Que le puedo ofrecer?

Dijo el chico y cuando desvíe mi mirada del menú a su rostro note que era el tipo que me chocó:

ALEXIS: - ¿TÚ?

Pregunté sorprendida y molesta, el chico pareció igual de sorprendido que yo:

LOUIS: - Mira niña yo no quiero problemas, solo estoy haciendo mi trabajo.

Dijo mirando nervioso a su alrededor:

ALEXIS: - Sí claro, yo también tenía un trabajo, ah por cierto también mi escuela y mírame, estoy en una maldita silla de ruedas y tengo que usar estas muletas...

Dije molesta en un nivel moderado de voz, para que solo el me escuchará, de repente recibo un mensaje:

DESCONOCIDO: - Hola, ya estoy aquí :) :) :)

Leí el mensaje de Bruno y miré a mi alrededor, al voltear discretamente a los costados lo encontré con la mirada y levanté mi mano para que pueda verme, al mirarme sonrió y se acercó a mí, sentí un revuelo enorme en mi estómago al verlo aproximarse, se veía bastante bien, llevaba una camisa de vestir desfasada y unos pantalones de vestir ligeramente pegados al cuerpo y unos zapatos perfectamente lustrados, y su cabello que se despeinaba ligeramente era presurosamente acomodado cada 10 segundos, cuando voltee a mi lugar, estaba el chico parado frente a mí, pude no notar el contraste él traía unos viejos jeans, una camisa polo negro como uniforme del establecimiento, los brazos descubiertos, y en su torso un pequeño mandil, no podía evitar embobarme al mirarlo, ligeramente desaliñado, mi vista reparo en su pecho donde leí el pequeño gafete con su nombre Louis, antes de que este se retire de la mesa:

BRUNO: - Hola... ¿Tenías mucho esperando?

Llegó Bruno preguntando con una amplia sonrisa y falta de aire, yo negué devolviendo la sonrisa: