27.

186 13 3
                                    


Becca.

—No puedo creer que falta poco para navidad, es mi primer navidad embarazada. —Repite Andrea mientras entramos a una tienda de ropa. Bia y yo sonreimos, entendemos su emoción o bueno casi—. Tres días es muy poco, ¿No? Apenas ayer era septiembre, ¡Dios! No puedo con la alegría.

Sonrió al ver algo que perfectamente le puedo regalar a Andrea para cuando su pancita comience a notarse, aún no han dicho nada a la prensa pero en un par de meses se que se notará. Según lo que sabemos, quiere llevar su embarazo como algo más privado, disfrutarlo sin odiar se a así misma por lo que digan los medios de ella, a veces la fama cuesta bastante.

—¡Luces tan radiante! —Dice Bia y asiento.

—Te ves tan llena de energía. —añado—. Y luces hermosa.

Los ojos de Andrea se cristalizan y nos abraza. —Lo siento, son las hormonas. —Nos separamos—. Creo que incluso a Grant lo tengo harto con mis cambios de humor.

—Lo dudo, se ve más enamorado de ti que nadie. —Digo.

—Yo sigo sin creer que conocí a Grant Gustin. —Chilla emocionada Bia.

Nos separamos poniendo un límite de tiempo para terminar las compras de ropa, yo voy directo a donde ví la ropa para embarazadas, en cuanto llego ahí me doy cuenta que hay mucho más que escoger de lo que creía, no termino por decidirme así que optó por un camisón con el que podrá dormir y una sudadera azul con la frase “Bebé en camino”   estampado en la parte de la barriga, además de eso compro un vestido blanco que se que le quedará perfecto para cuando termine su embarazo. Después me dirijo a la zona de ropa para dama, busco un vestido para Bia, ella los ama, termino optando por uno verde, cuando recibo una llamada.

—¿Si? —contesto sin ver quién es.

—Becc. —La voz de Lou suena alegre—. Ya casi está todo listo. —Dice y se escucha un ruido—. ¡No rompan las cosas! —Grita.

—¡Por dios! —Suelto—. Gracias.

—¿Cuando quieres? —Pregunta.

—¿El 20 de enero estaría bien? —digo preocupada.

—¡Claro! A Will le hubiera encantado que fuera en su cumpleaños. —Me anima y se que dice la verdad.

—Bien, ¿Te parece si nos vemos mañana para ver cómo va quedando?

—Por supuesto.

—Te veo mañana, besos.

—Besos. —Dice antes de colgar.

Sigo en busca de ropa y no puedo pasar por desapercibido un vestido azul oscuro que me encantaría llevar en la cena de navidad, no es aparatoso, es bastante sencillo, escote en forma de corazón y la espalda descubierta, es largo pero lindo, me lo pruebo y genera inseguridades en mi, tomó un respiro antes de comenzar a decirme a mí misma que todo lo malo está en mi cabeza. Decido comprarlo porque no quiero quedarme sin vestido para la cena. Cuando salgo veo una camisa blanca que se que Andrea amará y no puedo evitar comprarla, camino a pagar paso por la sección de bebés y noto un traje verde muy lindo, se que Andy y Grant no tienen estereotipos así que se lo pondrán.
Abro paso hasta la sección de caballeros dónde compro una sudadera morada para Lou, una camisa roja para Thiago, una camisa roja con el símbolo de un rayo a Grant y dos camisas para Tom; una gris y una de botones negra con rayas blancas.

Pago y noto que soy la primera en terminar, aún quedan seis minutos para que el tiempo se acabe, así que decido quedarme sentada cerca de la salida de la tienda. Dónde noto que también hay una sección de mascotas, aprovecho para comprarle un par de juguetes a Willow, una bolsa de premios y una sudadera rosa.

𝑌𝑜𝑢 𝑠𝑎𝑣𝑒𝑑 𝑚𝑦 𝑙𝑖𝑓𝑒. // 𝑇𝑜𝑚 𝐹𝑒𝑙𝑡𝑜𝑛.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora