Melanie
—¿Y bien? —pregunté, ansiosa.
El lunes por la tarde, me encontraba en el departamento de Landon. No es tan pequeño ni tan grande, pero es un espacio acogedor para dos personas. Se ve muy ordenado y no podía creer que oliera rico sabiendo que aquí viven dos chicos. Es decir, cualquiera pensaría que son desordenados, sucios e irresponsables. Todo lo contrario, se dedican muy bien a su vida independiente.
Sentados en su sofá, él estaba leyendo el manuscrito. Lo había hecho en computadora pero decidí imprimirlo para mostrárselo. Me lo encontré en la universidad y me invitó a que vayamos a su departamento. Tiene una pequeña terraza al costado de la cocina que da a la salita y se ve el parque del frente y algunos edificios. ¿Cómo habrán conseguido todo esto?
Landon levantó su vista del manuscrito hacía mí.
—¿Sabes qué es lo que más me gusta aparte de todo?
—¿Qué cosa?
—Que hayas cumplido tu promesa.
Esbocé una sonrisa.
—¿Si te gustó?
—Claro. La narración es fluida, la trama te atrapa y en la redacción no hay errores ortográficos. Si la profesora no te pone como la mejor de la clase quemaré la universidad.
Aplaudí como una niña pequeña y le di un abrazo rodeando su cuello con mis brazos. Me separé un poco, sonriéndole.
—Las calificaciones salen dentro de unos días. Si apruebo, vamos juntos a la fiesta de este sábado. Junto con Aiden, Jude y Via. Y si no, igual iré para calmar mi tristeza.
—Eso no va a ocurrir —me dio dos golpecitos en la nariz con el dedo índice.
Esa acción se sintió reconfortante.
—Tengo que estar preparada para lo que sea.
—No lo pienses mucho —me aconsejó—. Y si lo haces, que sea en positivo. Atraes lo que sientes.
—¿Esa es una filosofía de vida?
—Tal vez —sonrió.
Lo que más me agradaba de pasar tiempo con Landon es que era ese simple hecho. Pasar tiempo con él. Podríamos estar echados en su cama mirando el techo y simplemente no me aburriría. La verdad que en esa época de mi vida me pareció raro. Ahora que lo sigo recordando, ya no lo es tanto, porque sé su significado y lo tengo muy claro.
—¿Sabes qué se me ha antojado? —le dije.
—¿Hamburguesas?
—No, galletas con chispas de chocolate. Venga, vamos al supermercado, compraré dos paquetes de ellos —hice un ademán de coger mi bolso, pero el castaño me interrumpió.
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Si amas a alguien (pausada)
Romance"Si amas a alguien díselo. Incluso si tienes miedo de que no sea lo correcto, incluso si tienes miedo de que pueda generar problemas, incluso si tienes miedo de que pueda acabar con tu vida por completo. Dilo, dilo fuerte... y después verás" -Mark S...