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Aidan.

Hace cinco días que nuestro hijo llegó ha este mundo y de momento no da muchas molestias, solamente sabe comer, hacer del baño, regresar la leche, dormir y dormir durante todo el día, cuando está despierto por más de tres horas es muy raro. Comienzo a checar algunos departamentos en Toronto quiero un lugar donde mi familia y yo podamos salir a dar bonitos paseos, a lo que voy es que busco un departamento que cerca tenga un parque, un lago, algún salón recreativo algo para que no estemos encerrados todo el día. Será una sorpresa para el cast el llevar a Evan, ellos saben que voy con t/n pero con un hijo no, queremos ver sus reacciones.

—Amor me daré un baño ¿Checas al bebé? —pedí.

—Si yo lo cuido.

—¿Estás bien? Te he notado muy triste.

—Si, estoy bien.

—Sabes que puedes hablar conmigo ¿Cierto?

—Lo sé mi amor, gracias pero estoy bien. Te amo.

—Yo más preciosa.

Mientras me bañaba pude sentir como alguien abría la puerta, creí que era T/n así que no le di importancia hasta que escuche que tocaron la puerta de vidrio que está en la regadera. Voltee rápidamente pero no había nadie.

—¿Qué demonios?

Termine de bañarme rápidamente, enrolle la toalla en mi cintura mientras afeitaba la ligera barba que comenzaba a salir. Un ardor en mi espalda me hizo quejar de dolor.

—¿Todo bien cariño? —escuche a T/n decir desde la cama.

—Ven tantito por favor.

Ella se acercó al baño, abrió la puerta y me miro confundida, no dije nada solo me di la vuelta para que viera mi espalda. 

—¿Qué te hiciste? Cariño estas rasguñado. 

—No hice nada, me estaba afeitando cuando me ardió la espalda. Me arden.

—Siéntate aquí te limpiaré ese rasguño.

—¡No, me arderá más!

—Aidan, no te puedes quedar así, te pondré una pomada para evitar que se te infecte.

—¿Arderá?

—Probablemente cariño pero es mejor que te arda a qué se te haga una fea cicatriz.

A: Listo amor, encontré helado de fresa y vainilla.

Tu: Deja la puerta abierta hace calor.

A: Mejor prende el aire.

Tu: No, estará muy fresco para Evan se enfermará, mejor deja abierto la puerta.

A: Bien, toma tu helado.

Tu: Se ve rico.

A: Pues es tu helado favorito.

Antes de tomar la primera cucharada de Helado escuchamos a Chase gritar desde la sala.

Ch: ¡Ya llegué!

A: Había tanta paz en esta cas

Tu: ¡Estamos arriba!

Ch: Allá voy.....Auch.

A: Seguramente ya se mató en las escaleras.

Tu: Tal vez si ¿puedes ir a verlo?

A: ¿Yo?

Tu: Iría yo pero..

A: Bien, voy yo.

Despues de una pomada en mi espalda y un regaño de T/n por quitarle la mano cuando lo estaba haciendo, regresamos a la cama, comíamos un poco de helado mientras nuestro bebé dormía cómodamente. Chase entro a nuestra habitación para robarse el helado.

— Dame helado —dijo sentándose aún lado de T/n, me hicieron a un lado.

—Shhh, despertarás a mi hijo.

—¿Cuál es tu cuchara?

—Toma

—¿No tienes otra cosa que hacer Chase? Mejor me voy al cuarto de los niños, estaré viendo una serie en mi laptop.

—¿Enserio harás berrinche?

—Si, me voy.

—¿Está en sus días o que?

—Cállate que si te escuché Hudson —grite desde la habitación de los bebés.

Ch: Esa era la idea —respondió.

—¿Por qué regresaste a casa y dejaste a Charli?

—Porque no me quería quedar, aparte tuve una pequeña discusión con char.

—¿Qué pasó?

—Dos palabras, Payton Moormeier.

—¿Por payton? ¿Por qué por el?

—Porque le dije que ella y payton están últimamente muy juntos, me dijo que si estaba celoso y cosas así, yo me enoje y le dije que entonces dejara de salir con el y ahí se armó la pelea.

—Pues no deberías tener celos de Payton, Charli te ama Chase.

—Yo sé pero...hay algo en el que no me convence, andan los dos muy raro.

—Chase, payton es como tu mejor amigo no creo que sea capaz de estar con Charli sabiendo que está contigo y que tienen un hijo. 

—Si estuvo contigo a qué no esté con Charli. 

—Yo solamente quería decir que...

Chase.

T/n estaba hablando cuando el sonido del timbre la interrumpió. Puse la cuchara en el helado para bajar a abrir, me lleve una gran sorpresa al ver quienes estaban parados en nuestra casa.

—¿Qué quieren? —pregunté molesto al ver a mi padre y al...de t/n. 

—Podemos pasar, necesitamos hablar.

—Es importante.

—Pasen...supongo.

—¿Está T/n?

—¡T/n, baja un momento, por favor!

—¡Voy!

T/n.

Baje las escaleras después de pedirle a Aidan que cuidara del bebé. Chase quien estaba al final del último escalón me susurro "Tienes que estar tranquila"

Mis manos se cerraron en puño al ver a las personas que más odio en este momento.

Mis manos se cerraron en puño al ver a las personas que más odio en este momento

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✰ Los Gallagher ✰ Aidan Gallagher (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora