HEATHER 2 (Terminada)

~14~

El agente le hizo una señal a sus acompañantes y éstos asintieron, dándole una segunda llave de la habitación. Abrió la puerta y Naruto entró junto con él. Se quedó estático ante la escena que tenía delante; allí estaba Neji, con una mujer que conocía desde hacía muchos años, literalmente follando, pues los gemidos de la Omega inundaban el espacio.

—¡¿Qué mierda...?!— gritó éste al notar a sus visitantes. De inmediato palideció al distinguir a Naruto y se apartó de Hinata. Ella gritó y se cubrió con una sábana —¡¿Qué significa ésto?!

Shikamaru resopló y después de que sus compañeros entraran, cerró la puerta, alcanzó una silla y se sentó cómodamente. Naruto seguía sin mover un músculo.

—Neji Hyuga...— comenzó el pelilargo —Cuéntanos como lo hiciste...

—¿De qué diablos están hablando?— preguntó nervioso, mientras miraba a Naruto y se ponía sus pantalones.

—Vamos, no te hagas el tonto— se burló el agente —Quiero que me expliques lo que ocurrió en la habitación de Sasuke Namikaze, la noche antes de su regreso a Tokio— Shikamaru observó de reojo como los puños de Naruto se apretaban, pero no se movió del lugar.

—No sé de que hablas— espetó y Hinata gimió.

—Entonces te lo explico yo...— Shikamaru se tomó el tiempo de sacar un cigarro y encenderlo —Esa noche, durante la fiesta, notaste como Sasuke comenzaba con síntomas de celo. Ya de antemano habías planeado deshacerte de él, gracias a la petición de la señora aquí presente, que además es tu prima— señaló a Hinata —Convenciste a otro miembro de la banda para planear una trampa esa misma noche. En lugar del supresor que Sasuke necesitó, le dieron un somnifero y lo desnudaron. Tú fuiste el que tomó las fotografías y el que las difundió con una cuenta falsa desde un cibercafé. Pero no te salió tan bien, ¿verdad?— preguntó y Neji retrocedió un paso por reflejo, al sentir las feromonas que Naruto había comenzado a emitir —Hubieses cumplido alrededor de catorce años de cárcel por drogar a una persona y difundir imágenes sin su consentimiento, pero lo jodiste en serio. Al parecer tu amiguito se arrepintió de lo que hizo y antes de que se lo contase a alguien, decidiste hacer algo al respecto. Le sumaste veinticinco años más a tu condena por asesinato en primer grado de Gaara Sabaku. Y todo por una Omega... No cabe duda de que los Alfas no somos la casta dominante— se mofó.

Naruto soltó una risa nerviosa y luego de relamerse los labios, comenzó a acercarse a Neji a paso lento.

—Espera...— dijo éste, el miedo evidente en su voz —No lo tocamos. Solo estaba dormido... no le hicimos nada— explicaba tembloroso.

—Arruinaste mi relación, mi matrimonio... a mi bebé ¡¿Y TIENES LA MALDITA CARA DE DECIR QUE NO HICISTE NADA?!— gritó colérico y de un puñetazo, lo hizo caer de espaldas al suelo.

Se subió a horcajadas encima de él comenzó a golpearlo con rabia, una y otra vez. Los policías hicieron por detenerlo, pero Shikamaru se puso de pie y los detuvo con un gesto de su mano.

Bullía de enojo, totalmente descontrolado. Las imágenes de Sasuke llorando, gritando en el hospital, la sangre sobre las sábanas; aumentaban su estado de furia. Todo el dolor se canalizaba a través de sus puños hacía la cara de aquel desgraciado.

—¡Detente! ¡Lo vas a matar!— gritó la Omega y se lanzó a tirar del brazo de Naruto. El Alfa, totalmente ido, la apartó con un golpe en la mejilla, que le hizo escupir varios incisivos en el suelo.

—¡Agente!— gritó uno de los policías, llamando la atención de pelilargo.

—¡Naruto, para!— gruñó Shikamaru, pero el rubio estaba obtuso a cualquier cosa que no fuera su desquite —¡Mierda!

—¡Te voy a matar, desgraciado!— gritó con sus ojos rojos y enseñando sus colmillos a un Neji ya inconsciente.

—¡Maldición, Naruto! ¡No lo jodas, hermano!— advirtió el otro Alfa, cubriendo su nariz ante las feromonas del dominante.

Entonces tomó un taser del cinturón de uno de sus compañeros y acercándose un poco, le disparó en la espalda. Naruto gruñó entre dientes soportando la descarga eléctrica, pero no se apartó. Otro policía hizo lo mismo, y con una segunda descargar, el cuerpo del Alfa se sacudió y se desplomó hacía un lado sobre la alfombra.

Los policías sacaron al maltrecho Neji entre dos de ellos y antes de que se lo llevaran, Shikamaru advirtió;

—Se cayó por las escaleras mientras huía— los dos policías se miraron y asintieron en complicidad.

—¡Yo lo diré! ¡Diré que lo golpearon!— gritó Hinata con su boca ensangrentada, mientras otro guardia le ponía las esposas para sacarla del lugar.

—Hazlo, ya  Asuma Sarutobi a sido notificado de tu arresto. Tu esposo no está nada contento de que su Omega éste implicada en un asesinato, si además de eso le aconsejo que le haga una prueba de ADN a su hija, no creo que un hombre tal influyente como él, te permita salir de la cárcel— Amenazó, Hinata siseó de rabia y calló, resignada a su arresto.

Shikamaru se acercó a Naruto, que aún permanecía en el suelo. Le golpeó la mejilla varias veces con el dorso de su mano y el Alfa comenzó a abrir los ojos. Su cabeza quería estallar y todas sus articulaciones, principalmente su cuello, dolían demasiado.
Logró sentarse con la ayuda de su amigo y luego cubrió su rostro con las manos.

—¿Qué le hice...?— preguntó para sí mismo, pensando en Sasuke.

—Ve a arreglarlo— aconsejó Shikamaru y lo apoyó cuando el rubio se puso de pie —No te culpo por lo que sucedió, Naruto, pero deberías aprender a analizar un poco las cosas, antes de ser dominado por tus impulsos y tu orgullo.

—Iría ahora mismo... pero no sé donde carajos está— cerró los ojos ante una repentina punzada en su cabeza —No quiere verme y su hermano no me dice donde lo tiene escondido.

Y como si lo llamara, su celular vibró, mostrando el nombre de Itachi en la pantalla. Tomó la llamada apresurado;

—Estoy delante de tu casa, apresúrate en regresar. Te llevaré con Sasuke.