Dime tu deseo

III. ESOS NO SON PANECILLOS

La oscuridad empezaba a abrumarla, sobretodo porque estaba tratando de encontrar alguna luz que le permitiera descifrar lo que estaba pasando. Ponerla en contexto. Pero el único sonido que retumbaba era la voz de seda de su mejor amiga. 

─ ¿Nayeon? Nayeon...

Era la voz de Jennie. Así que probablemente el reflejo extrañamente desenfocado y doble, debía ser de su cara. 

─ Oh, coneja... ─La chica de baja estatura volteó a ver a la rubia─. Haz algo.

Pero la joven sólo se cruzó de brazos y giró su rostro hacia otro lado. 

Jennie resopló, mientras Nayeon empezó a abrir los labios. 

─ Sólo está exagerando. ─murmuró la genio. 

─ Oye Im, ¿estás bien? ¿Recuerdas lo que pasó?

─ ¿...Je-Jennie? ─Nayeon estiró su mano y sobó su barriga─. Creo que... tengo hambre.

Su estómago resonó bajo la palma de su mano. 

─ ¡¿Es en serio?!

~🥀~

Las almohadillas empezaban a ceder a medida que iba empujando levemente su cuerpo contra ellas. El ambiente parecía bastante romántico, incluso cálido si se podía decir, lo que la hacía temblar.  Incluso las velas estaban empezando a ponerla nerviosa. 

~🥀~

─ ¿... En la isla?  

─ En la isla. Y ahí la encontré.

─ La banana.

─ ¡No! ─Jennie se arrodilló en el mueble y recostó sus brazos en el respaldar para lograr hacer contacto con su receptor─. La tet- digo la lámpara. La lámpara.

─ ¿Quieres ...? ─Irene hizo un ademán con la mano para que se voltee y acomode bien sobre el mueble, a lo que la joven morena respondió con una mueca. 

Jennie se echó nuevamente. ─ Y de ahí apareció el genio.

─ ¿El Genio ...?

─ Ya sabes. ─Esta vez la morena sólo giró el cuello para generar el contacto visual, pero una mano logró detener el movimiento y giró su cabeza a la posición inicial─. Genio, como en lámparas y deseos... Aladino y esas cosas.

Irene apuntó en la  agenda. 

─ Dime, ¿ese genio se parece a tu padre o a algún héroe que tenías de pequeña?

─ Imposible, papá tenía barba. Este genio como que es joven, tiene busto, labios rosados ​​y cabellos largos, ya sabes, como en 'mujer' ¿Qué tanto apuntas? 

─ Voltéate. ¿Y de pura casualidad esta joven genio tiene nombre?

─ Nayeon dijo que tenía cara de Ramona, pero yo le puse otro nombre, recuerdo que tenía una vecina que tenía un hámster, se llamaba-

─ ¿Qué vecina?

─ Jessica Jung.

─ ¿Así que 'Roseanne'? Eres tan original con los nombres, Kim.

─ Sólo necesitaba un nombre.

─ Así que Nayeon estuvo ahí.

─ Sí.

─ ¿Y recuerdas si esta genio se parece a tu madre o a alguna representante de algo que admirabas? ¿Britney Spears? ¿CL? 

─ No, nunca la había visto antes. Bae, ¿qué tanto escribes? ─Jennie había vuelto a arrodillarse para ver a la pelinegra.