"Dolía verla, porque sabía que no era mía. Que no podía tenerla".
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MASON BLAKE.
Se fue sin siquiera despedirse.
No sé por qué me molesta tanto que se haya marchado sin decir adiós.
Estaba caminando aburrido cuando me encontré con un William que lucía tanto deprimido como feliz. Me acerqué a preguntarle qué le pasaba, y claro, ya conocía la respuesta: Morgan. La pelirroja se había marchado, y William tuvo la oportunidad de conocer a su padre adoptivo. Según William, el hombre no le inspiró nada de confianza. Es evidente que lo que realmente no le gusta es que su hija llame "padre" a otro hombre. Celos, eso es lo que tiene William.
Molesto, es como me siento al saber que no la veré durante una semana y media, y ni siquiera se dignó a decir adiós. Sé que ya lo recalqué muchas veces, pero no termino de asimilarlo.
William nos pasó su número, por lo que podría estar en contacto con ella, pero ¿por qué debería ser yo quien la contactara? Ella también tiene mi número, puede marcarme si quiere.
El beso que le di sigue rondando mi mente, y ni siquiera sé por qué lo hice. No soy una persona sentimental, no me gusta serlo. Creo que, después de todo, terminó cayéndome bien la mocosa.
"No te quiero lejos de mí". Eso le dije y es verdad. Por alguna extraña razón, necesito tenerla cerca.
Tomo el celular y tengo una batalla interna conmigo mismo entre llamarla o no hacerlo. Busco su número en mi móvil y, cuando finalmente decido ceder, alguien interrumpe.
Ángela entra a mi habitación sin siquiera tocar, y vuelvo a molestarme.
—¿Qué no sabes tocar? —refunfuño.
—¿Qué no sabes ser amable?
—A duras penas lo soy contigo, agradécelo —la señalo mientras veo de reojo mi móvil.
—Eso es porque soy lo suficientemente hermosa como para que me trates bien —se sienta en mis piernas y me da un beso casto en los labios.
Ángela tiene un cuerpo fenomenal, su piel morena clara me cautiva, y sus ojos grises azulados son dignos de admirar. Imposible tratar mal a semejante diosa, aunque a veces ganas no me faltan. Puede ser perfecta, pero es muy intensa en cuanto a nuestra "relación", la cual le he dejado en claro mil veces que no existe.
—¿Quieres hacer algo hoy? Casi no nos vemos. Desde que eres el cuidador de la hija de William, eres muy difícil de encontrar —comienza a llenar mi cuello de besos y no siento absolutamente nada.
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PROFECÍAS OCULTAS || [#1] Entre Fragmentos [COMPLETA]
RandomEn este lugar nada es lo que parece. Nadie es quien dice ser. Sufre más el sabio que el ignorante. Pero la verdad es que aquí nadie sabe nada. ¿Por qué te sacrificarías tú? ¿Amistad? ¿Amor? ¿Ambición? ¿Qué puede más? ¿Quién es quién? ¿Vale la pe...