Capítulo 19: El corazón de una sirena arranqué, y en el mar casi me ahogue.

11 6 0
                                    

Una semana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una semana.

Tuve que esperar una semana para poder bajar las sospechas de Victoria sobre lo que estaba haciendo; recolectar ingredientes para traer a mi madre de regreso. Después de que ella, Theodora, Sam y Pierre terminaran su asunto de... la orgía, fue bastante incomodo mirar a los cuatro a la cara. Theodora y Victoria estaban igual que siempre, sin importarles nada ni nadie, pero Sam y Pierre apenas nos miraban a los ojos sin sonrojarse.

Cuando pasaba por el pasillo de las habitaciones, escuche a Balthazar hablarle a Sam en voz baja, después de todo el asunto.

- ¿Por qué?

- No lo sé amigo, solo pasó. – La voz de Sam sonaba más fuerte y masculina que la primera vez que lo había escuchado. – Estábamos jugando cartas esperando por ustedes y una cosa llevo a la otra... cuando me di cuenta ya tenía mi pene metido en la maldita vampira.

- Espera... ¿No lo estabas haciendo con Victoria?

- Sí, pero eso pasó al final. Al principio estaba con Theodora en esta posición...

Pude escuchar como Balthazar se ahogaba con su saliva de la impresión.

- No quiero detalles.

- Te diré algo Balthy, jamás pensé que tener sexo sin compromiso se sintiera tan... bien.

Después de eso, traté de pasar desapercibida, no quería que supieran que había escuchado su conversación.

En la cocina fui interrogada por Victoria que se había puesto muy cómoda en nuestra casa.

- ¿Para qué necesitas el polvo de Hadas? – Su cabello estaba húmedo debido a la ducha que había tomado con Sam.

- Es solo un hechizo simple – La mire directamente a los ojos sin acobardarme - ¿Por qué la curiosidad?

- Nada – Me respondió mirándome fijamente. – Solo comprobando.

La ignore subiendo a mi habitación y evitando a los cuatro involucrados de la fiesta sexual. Después de algunas lecturas a mi libro de magia descubrí que ciertas playas eran más propensas a que las sirenas se mostraran, atraídas por la magia. Tendría que ingeniármelas para sacar uno de los cuchillos de cocina más afilados sin que ninguno de mis compañeros se diera cuenta. Nadie debía saber que estaba planeando matar a una sirena.

Nadie.

Para el viernes por la tarde, ya les había explicado a mis amigos que mis clases con Miguel y Astaroth tomarían hasta la noche, que no me esperaran para la cena. Balthazar se había preocupado un poco, sus ojos siguiéndome todo el camino desde la casa hasta que nos separamos para nuestras respectivas clases.

Con su nueva apariencia, Balthazar se me hacía intimidante. Su mandíbula tenía un aspecto más rudo que antes, sus ojos oscuros se miraban más profundos y cuando no alejaba la mirada de inmediato el calor se precipitaba a mis mejillas. Sus hombros eran más anchos y su nuez de Adam era más pronunciada. Tenía un aura masculina que me atraía como a una polilla a la luz.

Temporada de Magia Negra #1 [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora